A 24 horas para que se voten los decretos del Gobierno, que incluyen medidas anticrisis, laborales y en materia de equidad, la postura del Partido Popular sigue firme. No se abstendrán ni votarán a cortesía si Sánchez no acepta las enmiendas propuestas para deducir impuestos a los productos de primera obligación y a las rentas más bajas. Posición que llevan manteniendo desde hace días y que Alberto Núñez Feijóo ha reiterado este martes.
«Nos piden que reactivemos nuestro sentido de Estado para que Sánchez siga gobernando en contra del Estado y para que internamente de unos días se vote la ley de indulto. En sinceridad, no tienen ningún interés en pactar con el PP, porque se lo planteamos durante la investidura, que gobernáramos juntos, y dijeron que no. Prefirieron construir un pared y cuando eso pasa te puedes chocar contra él, como está ocurriendo ahora», señaló el presidente del PP en una entrevista en el software ‘Más de uno’ de Ondacero.
Feijóo fue muy crítico con Sánchez y sus medidas, pero sobre todo con sus formas. «Ha admitido en estos primaveras 142 decretos. Es proponer, ha hurtado al parlamento 142 leyes que se han admitido en La Moncloa. Ahora presenta estos decretos que, si los ve, como el de Honestidad, pretende una reforma de varias leyes, incluida una orgánica. Esto se tiene que hacer con proyectos, con informes y estudios y no cerrando las Cortes para que no puedan hacer su trabajo. Esto no puede tener el voto de ningún partido responsable menos de los que nos les importa la equidad de nuestro país sino sus problemas personales», apuntó.
La cariño de Sánchez -«nunca un presidente ha hecho el ridículo así en tan poco tiempo. Estamos en presencia de el desmoronamiento del desgobierno»- no se puede imputar al PP, sino a sus socios, con los que se ha «peleado» solo unas semanas posteriormente de ser investido.
Sí que asumió Feijóo que quizá su remedio a la totalidad de la indulto se explicó mal, sobre todo en el asunto de la disolución de los partidos. «Quizá nuestra explicación se dio por obvia y no puede ser. Entiendo que no la explicamos, que la presentamos y no hicimos pedagogía. Asumo que una cuestión de este tipo necesita una explicación más extensa», afirmó, aunque reiteró el fondo de la misma. «Hay 35 causas de disolución de un partido político en España y lo único que queremos hacer desde el PP es incluir un nuevo tipo que se anualidad si se convoca un referéndum ilegal o se declara la independencia y no se colabora con la equidad. Esto es poco que el PSOE quería hacer en 2019, tipificar la convocatoria de un referéndum ilegal».
La mediación de Reynders
Aquí llegó el momento más tenso de la entrevista, cuando Carlos Alsina, el presentador, le preguntó si en su propuesta se podría añadir la disolución de un partido condenado por participar a título fructífero de una trama de corrupción (en relato a la Gurtel y al PP). «Es evidente que no, pero no porque lo diga yo, sino porque no está en el Código Penal. Si quiere hablamos de otra cosa, pero lo que sí está claro es que no hay ninguna sentencia que condene al PP por malversación de fondos públicos o por cohecho», señaló Feijóo.
Sobre la reforma del CGPJ, el presidente del PP dijo que está a demora de la Comisión Europea (CE), a la que han pedido que ejerza de mediadora en las conversaciones con el PSOE. En este sentido, el presidente popular desveló que la posible marcha del Comisario de Honestidad, Didier Reynders, podría estar ralentizando la respuesta de la CE. «Está habiendo algunos movimientos en la UE y parece ser que el comisario Reynders se presenta a candidato de presidente del Consejo y si esto es así probablemente habrá alguna intrepidez de la presidenta de la Comisión de la no continuidad de Reynders como comisario de Honestidad para que pueda iniciar su campaña para presidente del Consejo. Vamos a ver qué nos dice la Comisión», reconoció.
Por posterior, Feijóo se refirió a la crisis de pellets que golpea Galicia y Asturias y acusó al Gobierno de ir en contra de la Xunta. «Por ahora los investigación dicen que estos microplásticos no son tóxicos. Lo que sí es tóxico es la utilización política de un desperdicios en las costas portuguesas que ha llegado a Galicia y Asturias y responsabilizar a la Xunta, con la que el Gobierno no se pone en contacto hasta el 3 de enero. Los gallegos tenemos mucha memoria y recordamos lo que hicieron en su momento cuando gobernaba el PP y sufrimos el Prestige. Nosotros vamos a barrer las playas con el apoyo del Gobierno, que está intoxicando, o sin él», puntualizó el gallego, quien apoyó al candidato popular a la Xunta, Alfonso Rueda, en presencia de la «incertidumbre» de otro «multipartito».