Si 2023 acabó ganándose el calificativo de «catastrófico» para los agricultores y ganaderos de Castilla y Arrojado, con costes disparados, producción recortada y precios por sus productos a la pérdida, sin olvidar el caos de la nueva PAC, 2024 no arranca con una previsión más halagüeña. Así que desde el sector, calientan motores para hacerse oír y elevar sus reivindicaciones.
«Finales de invierno o principios de primavera» es la momento marcada desde Asaja Castilla y Arrojado para retornar a salir a la calle. Así lo ha reformista este martes el presidente autonómico de la ordenamiento agraria, Donaciano Dujo. Es más, ha inscrito que desde Castilla y Arrojado «promoverán a nivel doméstico la movilización del campo».
¿Por qué desde aquí? Es la Comunidad «mayoritaria» en los grandes sectores -cerca del 40 por ciento de la cosecha de cereal, el 75 de la remolacha ingenio, cerca de la fracción de la papa, una cuarta parte del boyal…- , así que «cuando las cosas están mal, hay pérdidas y no hay visos de futuro, a quien más perjudica es a Castilla y Arrojado», ha señalado Dujo.
Con la movilización buscan «cambiar» la situación: que tengan unos costes de producción «asumibles», que los precios reciben por sus materias sean justos, hacer compatible con la actividad agraria el caos de la nueva PAC, que «no se quiten» las ayudas al gasóleo profesional…
«Tenemos que salvarlo. Si no es en los despachos, será en las calles», ha apto el presidente de Asaja, quien ha inscrito que como ordenamiento «mayoritaria» en Castilla y Arrojado intentarán «por todos los medios» la pelotón de obra. «Nunca había perdido tanto el campo y nunca había estado en unas condiciones tan complicadas», ha recalcado.
«Vamos a pelear, a contender para que no haya un descenso de las producciones agrarias«, ha clamado Dujo, quien ha censurado las políticas restrictivas a la producción, que a quien »más perjudican« es a Castilla y Arrojado. En este punto, ha señalado específicamente a la industria, por la habitual desnivel del precio de la cuajada a los ganaderos, que se ha traducido, ha señalado, en una extraordinario caída en el número de cabezas de yeguada. Por ejemplo, 33.00 reses menos de boyal y 140.000 de ovino.
Señal a la billete electoral
En un año con elecciones europeas en el calendario, Dujo ya ha reformista que harán «campaña para que la familia vote masivamente«. Sin señalar a ningún partido, lo que sí ha subrayado es que llamarán a la billete dejando claro que el voto del campo «no es un cheque en blanco», sino para que peleen «por una agricultura y grey del siglo XXI, un medio rural atractivo con condiciones sociles, económicas y empleo, y un medio bullicio sostenible».