Los sindicatos tienen sus dudas y critican que no hayan contado con ellos. Los empresarios piden “más rigor”. Y los médicos de atención primaria aplauden la idea. Pero, ¿Cómo funcionaría? Actualmente si se está malo, el trabajador tiene que asistir a su centro de salubridad y pedir la disminución. O si su empresa se lo permite, un justificante.
Con la autobaja esto cambiaría. No haría desidia ocurrir por el médico. El paciente llamaría a su puesto de trabajo y se cogería la disminución tres días. Raquel Muñiz, de Sagardoy Abogados, comenta que la “medida tendría encaje constitucional siempre y cuando se regule a través de algún tipo de norma o decreto. Porque a día de hoy no es viable.
Muñiz explica que durante los tres primeros días de esa disminución el trabajador no percibe ningún tipo de prestación económica por parte de la Seguridad Social ni por parte de la empresa, a no ser que el convenio diga otra cosa. Adicionalmente, la autobaja es una ejercicio habitual en Reino Unido, Alemania, Portugal o Suecia.
Aplicarse en situaciones excepcionales
La idea del Empleo de Sanidad es que se plantee en situaciones excepcionales como en el coetáneo contexto que vivimos de arrebato de contagios de enfermedades respiratorias. Mónica García ha incidido es que se prostitución de una medida “que ya está en otros países” y con la que “no hay ningún problema, no dispara el absentismo, al revés, alivio nuestro Sistema Retrete, alivio la atención al paciente y alivio incluso la relación con la empresa o con le motivo de trabajo”.
Esta autobaja es una medida que “estamos empezando a estudiarlo con los ministerios competentes, Seguridad Social, trabajo, pero obviamente vamos a poner en el centro el diálogo social y vamos a convencer a los actores sociales, tanto a sindicatos como a patronal, de que es una buena medida, no solo con los ejemplos de los países donde ya se pone en marcha, sino incluso con la evidencia científica”.