Al ascenso, pero con el freno poco echado tras el acelerón con que encaró la recta final de 2023, la tasa de incidencia de infecciones respiratorias agudas (IRA) -en la que se incluyen patologías como la resfriado o el Covid-19- «se empieza a estabilizar» en Castilla y Arrogante durante la primera semana de 2024, según el Mensaje Vigira de Vigilancia de las Infecciones Respiratorias Agudas de la Reunión. Por otra parte, según este exploración, se notan «descensos importantes en la población pediátrica». En su conjunto, todas estas infecciones acumulan una tasa de incidencia de 1.477 casos por 100.000 habitantes.
Así, a tenor de la progreso en la semana del 1 al 7 de enero, «la incidencia de síndromes gripales parece estar llegando a su mayor», señala el documentación. Aunque, añade, la circulación de los virus de la resfriado «se mantiene elevada».
Según los datos recogidos, la tasa estimada en el caso del síndrome gripal se sitúa en 230 casos por 100.000 habitantes, lo que representa un aumento respecto a la de la semana preparatorio, cuando estaba en 209 en la última de diciembre, pero supone a la vez un incremento más suave que en semanas anteriores, cuando la incidencia despuntó con fuerza.
De acuerdo a este documentación, esa incidencia estimada de 230 casos por 100.000 habitantes con síndromes gripales «no sobrepasa el nivel de intensidad medio».
En el caso del Covid-19, cuya incidencia «estaba aumentando» desde la semana 50 de 2023, al partir 2024 «parece moderarse». Presenta una incidencia de 79 casos por cada 100.000 habitantes frente a los 70 de la semana preparatorio.
La circulación del resto de patógenos respiratorios «se mantiene en niveles similares a las semanas precedentes», con la excepción del VRS, «que se sitúa por debajo del 10%», apunta el Mensaje Vigira.
Lo que todavía no frena son las hospitalizaciones de mayores de 75 primaveras, que «continúan aumentando» en la primera semana de este año, apunta el documentación de Sanidad.
En cuanto al porcentaje de positividad en las muestras centinelas se situó en esa primera semana de enero en el 14,5 por ciento en el caso del Covid, sutilmente por encima del ocho en el VRS, siendo mucho más elevado en el caso del virus de la resfriado: 53,2.
El documentación además analiza la tasa de incidencia acumulada desde la semana 40 de 2023 por grupos de permanencia. Así, mientras la bronquitis y broquiolitis afecta sobre todo a los niños, en Covid tiene viejo prevalencia entre los mayores. 5.308 casos por 100.000 habitantes entre los pequeños de 0 a 4 primaveras acumula la tasa de bronquitis y bronquiolitis, seguidos, aunque a distancia por los de 75 primaveras y más, con 868, y los de 5 a 14, con 471. En el resto de grupos, por se queda por debajo de 400 e incluso de 200 en los de 25 a 44 primaveras.
Por lo que respecta al Covid-19, frente a los 1.816 casos por 100.000 habitantes acumulados en la franja de los más mayores y los 1.375 en los de 65 a 74 primaveras, en los de 5 a 14 no llega a 200.
Y en el caso de la resfriado, además son los más pequeños los que presentan una incidencia viejo, con 2.147 casos acumulados por 100.000 habitantes entre los de 0 a 4 y 1.625 de 5 a 15. Por contra, los más mayores son los más ‘libres’, con acumulaciones que no llegan a 400 a partir de los 65.