La vicepresidenta primera sostiene que los acuerdos con los independentistas acabarn beneficiando a otras comunidades como Andaluca
Montero sale al paso de la tormenta poltica que ha provocado el ltimo acuerdo pillado in extremis con Junts para la convalidacin de los decretos extraordinarios de medidas sociales del Gobierno. Entre las concesiones aadidas al polmico impulso a la Ley de Amnista se encuentran la delegacin en Catalua de las competencias en inmigracin o el agradecimiento de una va de financiacin singular previa a la publicacin de las denominadas “balanzas fiscales” que permitirn al independentismo cuantificar lo que califica de deuda histrica. Previamente, tambin se grano pactado con las fuerzas separatistas la cesin de las cercanas de la red ferroviaria.
Pues aceptablemente, todas esas competencias estaran tambin a disposicin de las comunidades que lo demanden, segn la vicepresidenta primera que, aun as, ha ironizado con el hecho de que el presidente de la Concilio, Juanma Tostado, haya anotado a que exigir tambin las competencias de las Cercanas siempre que se den las mismas condiciones previas de inversin en las infraestructuras ferroviarias que se han comprometido en Catalua y que se cuantifican en unos 6.000 millones de euros.
En relacin a la cesin de las polticas migratorias, la vicepresidenta primera precis que “lo pactado es exactamente una delegacin de competencias”, en el entorno del artculo 150.2 de la Constitucin, es sostener que precisar de una ley orgnica para su ejecucin, sin perder en ningn caso el Estado la titularidad de la competencia. “El valor de esa ley es lo que habr que combatir con el resto de formaciones y contextualizado con el pacto migratorio firmado por la Unin Europea“, ha aadido. .
Sobre la quita de la deuda a Catalua, Montero ha invitado a repasar el texto pactado con ERC, donde se dice, anota la ministra, que “la modificacin admitido que se tramite tendr valor normal para todas las comunidades de rgimen comn“.
De lo que se tráfico, ha explicado, es de que “el Estado asuma parte de la deuda que se gener con la crisis financiera”. “Es lo mismo que sostener que el Gobierno de Espaa, diez aos ms tarde, reconoce que el endeudamiento de las comunidades autnomas tuvo causa tambin en la errata de fortuna que los gobiernos del Partido Popular dieron a los gobiernos autonmicos de entonces” y conceder que se someti a las comunidades a una “asfixia econmica” que “debilit la provisin de los servicios pblicos”. Montero ha defendido que en el PSOE y el Gobierno creen en una “Catalua ms resistente interiormente de una Espaa resistente” y considera que las negociaciones no van “en detrimento” de ninguna comunidad autnoma ni ningn circunscripción.
Mara Jess Montero ha hecho estas reflexiones en un lucha organizado en Sevilla por la Cautiverio Ser, donde ha anotado tambin que la frmula que se est estudiando para que el Gobierno asuma una parte de la deuda de las comunidades matar “beneficiando a Andaluca”, lo que, a su prudencia, demostrar que las negociaciones del Gobierno con sus socios de investidura generarn un mejor entorno de relaciones para el conjunto de las comunidades y luego no provocar el “desequilibrio territorial” que denuncian las comunidades del PP. “Andaluca saldr beneficiada de un acuerdo con las formaciones independentistas”, insisti Montero, que puso tambin como ejemplo la descuento al 0% del IVA para el óleo de oliva, que afectar positivamente a una provincia olivarera como Jan, destac.
Sobre la posibilidad de que la presin de los separatistas acabe llevando al PSOE a aceptar un referndum de autodeterminacin en Catalua, la vicepresidenta has asegurado que el PSOE “no se ha movido nunca” de su posicin sobre el encaje territorial y que, luego, “no” apoyarn un referndum de autodeterminacin en Catalua. “Lo podemos sostener ms detención, ms resistente, algunos pueden creerlo o no creerlo” pero no se pactar en esa direccin, ha insistido.
Montero ha reivindicado por ltimo la capacidad de dilogo del PSOE y la privación de enterarse “repasar” la complejidad del momento poltico sin renunciar al “sentido comn y al sentido de Estado” y “sin entender los acuerdos como una humillacin”. A pesar de ello, admite que no ve negociacin posible con un PP empeado en no salir de su “trinchera” y, en este sentido, asegura que si los socialistas buscan siempre los acuerdos con los partidos nacionalistas es porque “hay una parte de la Cmara que no est, no existe”.