La sesión ha comenzado con la explicación de los padres del chavea Alex. Dos primaveras y medio luego del incidente, la hermana, Ana Claudia Ionita, ha obligado que “ya no hay vida ni para mi hijo ni para mi”. “¿Por qué le habéis hecho esto?”, ha sido la pregunta desesperada que ha querido exhalar al terminar su explicación, la hermana de Alex, directamente a los acusados, presentes en la sala, pero que no han podido ver a los padres del chavea rumano de 25 primaveras, separados por un biombo.
Su padre, por su parte, ha confirmado que ya han recibido una indemnización de más de 840.000 euros, que está siendo dedicada al tratamiento del chavea.
Interrogatorio a los acusados
Posteriormente ha sido el turno de los interrogatorios a los 7 acusados, 6 de los cuales permanecen desde la embestida en prisión provisional. El primero ha obligado favor herido a Alex y haberle sustraído el teléfono móvil, en una explicación repleta de contradicciones. Ha admitido que de “de pequeño” formó parte de un colección llamado Hermanos Koala, “un colección de WhatsApp”, ha puntualizado.
El segundo procesado, por su parte, el de veterano época y el único que permanece en atrevimiento, ha asegurado no conocer a la veterano parte de los procesados, y que no participó en la embestida. Esa ha sido la tónica dominante entre la mayoría de los acusados, que han tratado de quitar importancia a la relación que tienen entre ellos, y no rememorar la veterano parte de lo sucedido aquel día.
Sobrevenir bebido en exceso ha sido otra de las tónicas dominantes de sus declaraciones. “Estaba muy borracho”, ha argumentado uno de ellos antiguamente de examinar que el día sucesivo colgó en redes sociales los videos de la embestida, que hoy han podido hallarse de nuevo en la sala, conexo a la frase ‘No me culpen porque estaba pedo’ porque “me sentía mal”.
Aunque todos aseguran no favor agredido al chavea Alex, uno de ellos ha obligado favor portado un objeto persuasivo de patrón y medio durante la embestida. “No tengo conciencia de cómo llegó a mis manos. Solo memoria lo que veo en el vídeo”.
El vídeo, prueba esencia
Una de las pruebas esencia en el causa es el video aguafuerte por uno de los menores que participó en la embestida y que se viralizó en las redes sociales. Todos aquellos que han podido identificarse en el vídeo, en el que se ve cómo propinan golpes y patadas a la víctima en todo el cuerpo, han sido acusados.
Otros seis menores ya fueron condenados a penas que oscilaron entre los tres y cinco primaveras de internamiento.
A lo amplio del causa está fijada la explicación de 23 testimonios y de más de 60 agentes de la Ertzaintza, así como peritos y médicos forenses.