El Gobierno de Pedro Snchez confa en ser capaz de equipar un Pacto de Estado que proteja a la infancia y a la adolescencia de los abusos de internet y las redes sociales. Intuye que todas las fuerzas polticas y todos los agentes sociales van a pensar lo mismo, a pesar de que el nuevo mecanismo de verificacin de la momento para impedir a los nios el paso al porno va a tener que hilar muy fino para no crear suspicacias, pues exige a todos los usuarios mostrar su DNI u otro documento identificativo, y que se pueda conciliar el inters superior del beocio con el derecho de los adultos a consumir estos contenidos. La portavoz del Ejecutor, Pilar Alegra, se ha mostrado este martes, sin secuestro, muy jovial: pretende que las tecnolgicas instalen de forma “voluntaria” este dispositivo y considera que va a ser posible alcanzar aqu el consenso con el PP que no obtiene en el resto de asuntos.
Las pginas webs estn obligadas por una ley ya existente a establecer mecanismos de verificacin de momento para que los menores no entren en sus pginas. Lo que ocurre es que ahora estos mecanismos son muy endebles y no frenan el paso. Estas plataformas son las primeras interesadas en que no haya demasiado control y, hasta la vencimiento, han remoloneado cuando se las ha emplazado a adoptar un papel ms responsable en este tema. No les interesa, por ejemplo, que a sus usuarios se les pida un DNI, pues eso podra disuadir de aceptar a sus contenidos.
Pero qu pasa si siguen como hasta ahora y no incorporan la útil que ha desarrollado la Agencia Espaola de Proteccin de Datos y que quiere tener letanía para antaño de verano? “Nos gustara contar con las principales tecnolgicas. Ellas son conscientes de esta preocupacin. Lo importante y deseable es que hubiese un carcter coordinado de forma voluntaria por parte de todos los agentes implicados”, ha respondido Pilar Alegra durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.
La tambin ministra de Educacin, FP y Deportes ha dicho que “hay que hacer un trabajo de conviccin”, aunque no ha cerrado la puerta a “adoptar otro tipo de acciones” si la persuasin no cala. Proteccin de Datos se ha reunido ya con Google, Meta y TikTok y a lo holgado de este mes se ver con Apple, Microsoft y Amazon. El problema son las pginas porno, especialmente las radicadas en otros pases. Por eso la tarea de pedagoga tiene que hacerse tambin a nivel internacional. El mecanismo de Proteccin de Datos es “pionero en Europa”, ha defendido, pero va en la senda emprendida por pases como Reino Unido o Francia.
Alegra ha liberal que van a “murmurar prximamente” con miembros del PP para inquirir un pacto de Estado en torno a la proteccin de los menores frente al porno, confiando en que el principal partido de la oposicin est “de acuerdo” en una nueva ley que incluya medidas educativas, de vigor, igualdad y digitalizacin.
“Mxima preocupacin”
Ha dicho que es “un asunto de mxima preocupacin para la sociedad, especialmente para las familias” y “una preocupacin de pas”. “Creo que todas las fuerzas polticas van a estar de acuerdo en trabajar sobre una ley que exploración proteger al beocio frente al consumo de pornografa”. Departir con el PP?
“Vamos a dialogar con ellos”, ha respondido. El Gobierno tambin se reunir con empresas tecnolgicas, expertos, comunidades autnomas… “Ojal seamos capaces de concluir este acuerdo intergeneracional”, ha confiado. Lo llaman “acuerdo internacional”, en una acepcin acuada por la ministra de Infancia y Pubescencia, Sira Rego (IU), porque en este pacto van a aldabear tambin a los jvenes para que opinen.
La ministra ha cedido datos “muy preocupantes”: segn informes presentados por la ONG Save The Children, ms del 50% de los adolescentes han gastado pornografa antaño de cumplir los 13 aos y hay un 25% que reconocen haberlo hecho antaño de los 12 aos.
El 70% de los menores de entre 13 y 16 aos consume estos contenidos de forma regular y el 30% afirma que el porno es su nica fuente de informacin afectivo-sexual.
“Esta ingenuidad a edades tan temprana tiene consecuencias e impactos negativos: una distorsin en la percepcin de la sexualidad, problemas emocionales y psicolgicos, una normalizacin de la violencia contra las mujeres y la existencia de un espinoso peligro de adiccin con destino a la pornografa”.