Felipe Gonzlez carga contra el “chantaje” de los independentistas y el “eco insoportable” de la votacin de los decretos


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Mientras en el Congreso se abordaba una mini reforma de la Constitucin y se enmendaba la Ley de Amnista, Felipe Gonzlez se desencadenaba a unos quinientos metros. En un homenaje a Gregorio Peces-Barba donde comparti escena con Eduardo Madina. Y en presencia de un cualificado pblico que inclua a la presidenta del Congreso, del PSOE; y el presidente del Senado, del PP; la cpula legislativo, algunos fiscales, ex ministros de los dos partidos mayoritarios, dirigentes de UCD y Miquel Roca. Un pblico que sanidad cerca de adentro y cerca de fuera el extenso discurso del ex presidente socialista, una autntica mocin de censura contra la gestin de su sucesor, Pedro Snchez, que se somete, en su opinin, al “chantaje” de las minoras chantajistas.

Aunque record que la Constitucin Espaola del 78 no es militante, durante casi dos horas el ex presidente fue el militante ms apasionado del texto constitucional porque, en su opinin, “los títulos de la convivencia estn siendo amenazados”, as como la agricultura del Poder Sumarial y la figura del Rey.

Gonzlez se expres en un tono muy crtico y cido contra el papel que los nacionalistas e independentistas estn jugando en sus acuerdos con Pedro Snchez. Denunci “la cantidad de tonteras y barbaridades” que dijeron sobre el discurso del Rey en la juramento de la Princesa de Asturias y el ataque contra la Constitucin es “despiadado y colosal”.

El ex presidente hizo un repaso por todas las polmicas que azotan al Gobierno de coalicin, empezando por la Ley de Amnista y acabando por los decretos mnibus. “Ya me gustara a mi una consulta a todos sobre la Ley de Amnista, que no es tal, sino una autoamnistia hecha por los condenados”. Insisti mucho el ex presidente en sealar que las fuerzas nacionalistas e independentistas son minoras que imponen su voluntad a las mayoras. “Yo no me he nacido de las posiciones de mi partido del da 23 de julio. Y hasta del 24”, advirti. La Ley de Amista no le parece “tolerable ni aceptable”, al tiempo que conden los “ataques insolentes e injustificados” de los independentistas catalanes contra los jueces que intervinieron en las causas judiciales del procs. En el pblico le escuchaban los jueces Marchena, Lesmes y Llarena, as como varios fiscales.

Gonzlez se “rebel” asimismo contra los decretos mnibus que mezclan reformas de la ley de causa con medidas sociales. “Lo pase mal en ese pleno, me llegaba un eco insoportable”. En su opinin, Snchez est perdiendo su legalidad de deporte asumiendo los chantajes de los partidos independentistas.

Siquiera Gonzlez se limit a censurar la forma de mandar de Snchez. Tambin carg contra la impracticable renovacin del CGPJ, de la que responsabiliz asimismo al PP. El ex caudillo de Gobierno propuso una reforma judicial para que cesen en sus puestos de forma automtica los vocales del CGPJ cuando finalicen su mandato y que se rada un periodo de un mes para que PSOE y PP lo renueven. Y si no lo consiguen, apost por un sorteo. Incluso lleg a pedirles a los presidentes del Congreso y Senado, sentados en primera fila, que pongan en el orden del da de todos los plenos la eleccin de los vocales que les corresponden.

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