Hace un año se conocieron las intenciones del Ministerio de Educación de modificar paulatinamente la Selectividad hasta alcanzar un nuevo modelo en 2028. Una idea que desde el primer momento no convenció a la Xunta, crítica con el enfoque que estaba adquiriendo la ABAU, por sus siglas en gallego. El curso que viene iba a ser el primero en incluir cambios en los exámenes, pero este jueves, una A pocos días del inicio de clases, el Ministerio tomó la decisión de extender las modificaciones por un año.
“Gracias a Dios”, celebró este jueves el presidente gallego, Alfonso Rueda, cuestionado sobre este tema en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consell de la Xunta. En el curso 23/24, las pruebas se organizarán como se viene haciendo en los últimos años, en lugar de incluir un ‘examen de madurez’ y suprimir una asignatura común, como estaba previsto.
Para el presidente regional, es aconsejable posponer los cambios en la ABAU, pero sólo si van más allá. Desde la Xunta llevan un año insistiendo en que debe haber un examen único para todos los alumnos de segundo de bachillerato, independientemente de la comunidad autónoma. Ahí es donde hay que llegar, defendió Rueda. Ha celebrado que el Gobierno “entre en razón”, pero espera que “ésta sea la primera parte de esa entrada en razón y que esta reforma de la ABAU, que recibe críticas unánimes, no sólo de las autonomías del PP, sea paralizado.” Defiende que “el objetivo tiene que ser una ABAU que iguale a los alumnos de toda España”, y apuesta por “un examen único”. En el caso de Galicia, a pesar de que los alumnos gallegos lideran las notas durante el curso, se encuentra entre las cinco autonomías con menor media en Selectividad, lo que sitúa a los alumnos gallegos en desventaja a la hora de acceder a Grados. Para participar en una carrera, la marca de corte es la misma para todos.
Petición de la Xunta
Como a pocos días de entrar en el nuevo curso faltaba planificación y los profesores no conocían la estructura de las nuevas pruebas para prepararlas adecuadamente, el Departamento de Educación instó por carta al Ministerio a detener los cambios, tal y como finalmente lo han hecho. hecho. La Xunta consideró “inadmisible” que tanto alumnos como profesores, aseguraron, no dispusieran de la información necesaria para afrontar las pruebas que deciden su futuro educativo. «Una vez más nos vemos afectados por la improvisación del Gobierno del Estado, en este caso, la Secretaría de Educación. Alrededor de 12.000 estudiantes gallegos no saben cómo va a ser hoy la prueba EBAU”, ha declarado este lunes el ministro, Román Rodríguez.