¿Y qué va a pasar ahora en el PP de Ourense?

Tras la salida de Manuel Cabezas como concejal, queda otra incógnita por resolver, cuándo dejará su cargo como presidente del PP local, algo que podría producirse más pronto que tarde, pero que todavía no está firmado. Y no se ha firmado porque esa decisión condenaría a los populares de la ciudad a lanzarse a una nueva gestora, como ya ocurría antes de la llegada de Cabezas. Los pasos a seguir serán supervisados ​​por la cúpula del PPdeG, para Santiago, que ahora mismo es quien controla el grupo municipal y todos los pasos en la dirección política del partido, algo que, sin duda, está detrás de la marcha de Cabezas, que no está de acuerdo con la dirección que lleva el El partido ha tomado el juego. Es la dirección de Santiago la que decide qué se vota en el pleno y cuándo darle aire a Jácome o no.

Ante esta situación, queda por aclarar qué hará la mano derecha de Cabezas, Pepe Araújo, quien Regresó al PP como independiente apadrinado por el propio Cabezas y que ahora se quedaría solo en el grupo municipal como crítico del pacto con Jácome y el único que podría estar al margen de las directrices que vienen desde la dirección gallega. El grupo municipal estaba roto y ahora lo estará menos, o eso creen los más cercanos a la formación. De hecho, en el pleno extraordinario de julio en el que el PP facilitó a Jácome la realización de la lista del alumbrado navideño, ni Pepe Araújo ni Cabezas comparecieron al pleno, alegando problemas de horarioAunque, según otras fuentes, el verdadero motivo fue su oposición a echar un cable al alcalde, como reclamaba desde el PPdeG. De momento, Araújo tiene una de las dos dedicaciones exclusivas del PP y no parece que se vaya a rendiraunque también hay una parte de los militantes que así lo ha sugerido.

Una parte de los militantes y el propio seno del grupo popular municipal llevaban tiempo presionando a Cabezas para que abandonara su acto en el Ayuntamiento, estar en Inconformidad por su ausencia en los últimos plenos, muchos de ellos los mismos que le rogaron que volviera al partido hace un año. “O lo eres o no lo eres”, dijeron algunos compañeros de su propio grupo, que vieron necesario poner fin a esta situación. Algunos militantes habían amenazado internamente con pedir un técnico a la vuelta del verano si la cosa seguía así, lo que ha precipitado el abandono de Cabezas.

Otra cuestión a resolver será si esta marcha de Cabezas acercará al PP a Jácome e incluso lo integrará en un hipotético gobierno bipartito, como sostienen algunos partidos. Si algo está claro, y que se mantiene en muchos estamentos, es que el paso dado por Cabezas demuestra que la posibilidad de una moción de censura contra Jácome Está más lejos que nunca. Y también rescata las críticas dentro del propio PSOE, donde algunos militantes, los más afines a Villarino, ya están insinuando que Paco Rodríguez debería hacer lo propio.