La compañía comenzó a trabajar en la cubierta del inmueble sin contar con los preceptivos informes, ya que la “Casa do Chinto” -que estuvo ocupada luego por la conocida comunidad Diéguez- es un admisiblemente catalogado, tal y como figura en el Plan Xeral de Ordenamiento Municipal del Concello de Esgos. Tiene un nivel de protección a nivel estructural y está inventariado. Se tráfico, según define el plan urbanístico permitido por la Xunta, como un “gran caserío de planta cuadrilongo sin patio central. De estilo sobrio y popular. Con cubiertas de teja plana a cuatro aguas. Tiene varias solainas y en un contiguo una gran museo”.
La obra, que podrá ser retomada en breve, según algunas fuentes, continúa paralizada. La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural acaba de resolver de forma oportuno el esquema, y el Concello acaba de finalizar el mensaje incluso oportuno, lo que permitirá la concesión de la deshonestidad, que todavía no tiene la luz verde.
Ahora sí, tiene la preceptiva deshonestidad con la que prevén continuar la reforma para adecuar el inmueble a un hotel boutique. Sin bloqueo, la obra había sido iniciada ya hace unos meses -pasando por suspensión la protección de la casa-. De hecho, la casa, incluso conocida como “casa das provincias” es el “pazo” o “casa señorial” más conocido por los vecinos de Esgos.
La compañía comenzó la obra en la cubierta del inmueble, que entra en el nivel de protección que tiene toda la estructura, e incluso intervinieron en parte del tejado, una de las partes recogidas en la ficha de protección en el catálogo de Patrimonio. Una vez la obra fue paralizada, se les instó a presentar un esquema adecuado a las normas urbanísticas sobre dicho inmueble, que entregaron y finalmente ha recibido luz verde de las administraciones.