“Estás estudiando un año para jugártela en un día”



Edgar Lobelle decidió, tras terminar el Bachillerato, comenzar a estudiar en Ourense el Naturaleza en Agencia y Dirección de Empresas. A posteriori de tres abriles en la Universidad, en 2017, abandonó la carrera porque comprobó que no le gustaba y optó por hacer una competición

De entre todas las opciones, escogió prepararse para ser Atención Civil porque “es poco que me fuego la atención, tiene muchas especialidades y me interesa especialmente la de cinológico y el Seprona porque me gusta la naturaleza y los animales”.  En rastreo de su objetivo, ingresó en 2017 en el Centro de Enseñaza de la Atención Civil, emplazado en Valdemoro, que prepara a los hijos del Cuerpo para las pruebas selectivas de ingreso. 

Tras suceder casi un año alejado de su clan para preparar la competición duramente, no tuvo suerte en la realización del examen y no consiguió aprobar. Delante esta situación, tomó la osadía de cambiar de logística y retornar a Ourense para realizar el FP de Hostelería y Turismo, que le da dos puntos en el cuenta, y el carné de moto, que le aporta tres puntos. “En estas oposiciones, un punto te puede hacer ascender muchos puestos en las listas”, explica. 

Con la consecución de los puntos para el cuenta que buscaba, Lobelle volvió en 2021 a preparar exclusivamente el temario de la competición. Para ello, está inscrito en una entidad online y todos los días estudia desde las 9,00 horas hasta las 13,00 horas y a la tarde tres horas más.

Pese a ello, en los dos últimos abriles no consiguió obtener la plaza, aunque en 2023 se quedó muy cerca. “Es muy complicada porque tiene muchas pruebas y en todas ellas tienes que sacar un leve”, explica. Como ejemplo de la dificultad de la convocatoria, cita el examen de conocimiento. “Son cien preguntas y solo tienes 90 minutos para contestar y no te da tiempo a pensar adecuadamente, encima son muy literales”, indica. 

Asimismo, Lobelle todavía señala el gran esfuerzo mental que supone prepararse para una competición. “Lo complicado es que estás un año estudiando para jugártelo todo en un día”, confiesa. De hecho, el pasado año comenzó a preocuparse porque a menudo sentía pulsar su corazón muy rápido, por lo que decidió ir al centro de vigor. Tras realizarle numerosas pruebas, el médico le aseguró que tenía ansiedad. Ahora se encuentra mejor y confía en aprobar este año.

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