Javier Otero Neira e Adrián Solla estrean “Seimeira”, unha nova ollada a Gal…



Javier Otero Neira y Adrián Solla estrenan “Seimeira”, un tema con claras influencias de la música popular gallega donde estos dos músicos combinan sonidos de piano, sintetizadores y la electrónica más actual para crear un universo sonoro donde ambos confluyen de forma orgánica. “Trabajamos juntos a gusto, no siempre ocurre, pero en este caso, o no rodamos a nivel personal, también se traduce en no estudiar y no intentar componer”, explica Javier sobre la novedad.

Así, el pianista de Estrada, que acaba de estrenar su proyecto “Xogo de Espellos” con la Real Filarmónica de Galicia, se une al músico y productor y pianista pontevedrés Adrián Solla. Pese a ideas infundadas, los dos músicos tienen claro que podría salir un primer tema, “Seimeira”, que marcaría el camino de construcción de un futuro proyecto discográfico.

Xa sacaron un single juntos, ¿qué más le puedes agregar al xa coñecido?

El nexo común de todos los temas está relacionado no sólo con la música gallega sino en general con la cultura de nuestro país. Desde el primer momento tenemos claro que lo que vamos a hacer tiene que ver con nuestra música. Por supuesto, llevémoslos a nuestro terreno creando un nuevo sonido tal como lo sentimos hoy, sin que cada uno pierda su identidad.

¿Crees que gracias a la fusión con la electrónica y el uso de recursos como los sintetizadores la música popular gallega tiene un resurgimiento?

La música popular gallega tiene su estética, simplemente hacemos o sentimos nuestras composiciones, con rasgos típicos de nuestra cultura, con las nuevas tecnologías e intentamos llevar nuestra música a un lugar donde podamos tocar y expresarnos con nuestro proyecto como es xurde us. ambos no estudian y no son directos. Puede que a nivel general nuestra música esté ahora más presente en festivales o salas donde antes era más difícil, pero los artistas gallegos siempre han tenido para nosotros una gran calidad, lo que no siempre coincide con los gustos de los dos programadores o el público general.

¿Cómo te insté, comunión?

Después de hablar varias veces sobre la realización del proyecto, concertamos una reunión a principios de año y comenzamos a improvisar y a sacar ideas, cada vez su estudio se actualizaba o empezaba un proyecto compartido online, debido a la distancia: A Estrada /Madrid. A partir de este éxito vamos pintando un cuadro de forma conjunta, según nuestro criterio. Desde el primer momento trabajamos juntos con bastante comodidad, no siempre ocurre, pero en este caso, o lo hacemos a nivel personal, también se traduce en no estudiar y no querer estar juntos.

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