Se prohíbe el uso de expresiones que evoquen publicidad de productos sanos o respetuosos con el medio hábitat si no se demuestra de forma solvente y robusta. Las marcas solo podrán utilizar en sus etiquetados expresiones como: “respetuoso con el medio hábitat”, “natural”, “biodegradable”, “climáticamente impreciso” o “eco” si son verdad y lo demuestran. Se indagación evitar la publicidad engañosa o las medias verdades, se quiere que el consumidor tenga el poder incondicional de audacia con la información completa y correcta en el etiquetado.
“Esta ley cambiará la vida cotidiana de todos los europeos. Nos alejaremos de la civilización del exclusión, haremos que el marketing sea más transparente y lucharemos contra la obsolescencia prematura de los productos. Las personas podrán designar productos más duraderos, reparables y sostenibles gracias a etiquetas y anuncios fiables”, según Biljana Borzan, eurodiputada ponente de la iniciativa.
Obsolescencia temprana
El texto asimismo promueve la traspaso de productos que duren. Los consumidores quieren productos de calidad, Así se prohíbe asimismo el uso de expresiones como “este lavavajillas dura 5.000 lavados” o “con esta lavadora podrás hacer 7.000 programas” si no se puede demostrar que esto sea así. Igualmente Europa quiere que los consumidores no cambien ayer de tiempo sus electrodomésticos sino que el cliente tenga la suficiente información como para animarse qué y cuándo hacerlo.
La información sobre la respaldo tendrá que ser más visible y se creará una nueva formalidad armonizada para dar más importancia a los productos con un periodo de respaldo ampliado.
Asociaciones de consumidores
Las asociaciones de consumidores como FACUA se han pronunciado sobre esta nueva directiva y celebran el texto pero reclaman que se proceda a su implantación cuanto ayer y de forma correcta por parte de los Estados miembros. Consideran que la reglamento podrá beneficiar a millones de europeos. Se indagación proteger al consumidor y avanzar en una patrimonio donde lo que prometen las marcas, es de verdad y no se pone en duda.
“Lo más importante es que las empresas ya no pueden engañar a la gentío diciendo que las botellas de plástico son buenas porque la empresa plantó árboles en algún ocupación, o afirmar que poco es sostenible sin explicar cómo”, añadía Biljana Borzan