La pareja que forman, indirectamente, Jácome y el PP es, cuanto menos, extraña. Jácome aprovecha cualquier oportunidad para atizar al PP, y admiten que no les agrada ni un poquito su “compañero” de conveniencia. Pero siguen adelante. Ayer, el concejal aprovechó para atacar a los populares con la marcha del que fue su candidato, ante un inexplicable silencio de los compañeros de lista de Cabezas, quienes abandonaron el foro ante las críticas. Y, tras ello, el concejal aprovechó para cargar contra Pepe Araújo, a quien acusó de atarse a la silla “con dos pelotas (sic)” y de “humillarse” por el salario. Pero él no se quedó callado. El exlíder de Ciudadanos no tardó en responder comparando a Jácome con Don Celedonio de “O porco de pé”, la famosa obra de Vicente Risco: “Se asciende de porco a marrau, y ahora a alcalde”.
Araújo, que confirmó que seguirá en las filas populares, y que recibió el apoyo público de sus compañeros de grupo, volvió a subrayar que no le gusta un pelo haber hecho alcalde a Jácome: “Tenemos miedo o raposo no galiñeiro, tenéis ese vixialo, no enfrente oposición”. En cualquier caso, Araújo dejó claro que rendirá homenaje a las órdenes del partidoPor tanto, no se percibe que la curiosa relación de intereses mutuos entre PP y DO pueda romperse a medio plazo. Cada vez que Jácome necesita la abstención de los populares, parece que los tendrá a mano. O, al menos, eso se desprende del inicio del mandato.
Mientras, el presidente del PPdeG, Alfonso Rueda, se despidió ayer de Manuel Cabezas y aprovechó para convocar a sus concejales en la ciudad, para evitar que se haga visible un “vacío de poder” tras la marcha del excandidato. En este sentido, Rueda reconoció que había tenido conversaciones con Cabezas previo a su renuncia y defendió su decisión de marcharse. “Su intención cuando se presentó era gestionar y para eso necesitaba ser alcalde y gobernar. Y no fue posible. Ese fue un motivo fundamental”, apuntó el líder de los populares gallegos, que ya dejó claro que Cabezas también dejará la presidencia del partido en la ciudad: “Él o presidente local y habrá que hacer una sustitución, pero estar dispuestos a seguir tirando a un hombre y ayudar. Él mismo podría ayudar cuando acaben las elecciones autonómicas y se lo agradezco”.
Rueda dejó claro que está preocupado por lo que pueda pasar: “Ahora la responsabilidad es que no haya un desastre eléctricoque el trabajo de oposición que hay que hacer en Ourense se haga de forma ordenada y este cambio no signifique parar el trabajo”.