Las centrales eléctricas reversibles permiten aumentar la generación de electricidad en los picos de demanda. Durante las horas de menor consumo eléctrico, se bombea agua desde el embalse inferior -el embalse de Castrelo, en este caso- a uno situado a mayor cota. Cuando se necesita energía en las horas punta, el flujo se libera hacia abajo y produce electricidad.
Esa es la idea básica de un proyecto que gana aún más relevancia teniendo en cuenta el presupuesto gestionado por la empresa promotora. Según los cálculos del documento inicial, el coste de la ejecución material de la planta reversible se acerca a los 235,4 millones de euros. Para hacernos una idea de lo que supone esta cantidad, la estación intermodal de Ourense costará más de 130 millones de euros, y los primeros ocho kilómetros de la variante exterior de alta velocidad, 111 millones de euros.
El motivo de la elevada inversión que requerirá la nueva central hidroeléctrica son sus características. Las instalaciones de generación serán subterráneas, con una planta caverna de tres pisos que costará 114,5 millones de euros. Entre otras intervenciones destacables, su túnel de acceso superará los 1,8 kilómetros de longitud. Todo este gasto contrasta con los poco más de 500.000 euros que se dedicarán a las expropiaciones.
El director general del grupo Cuerva es Gerardo Cuerva, que también preside Cepyme (Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa).
una gran balsa
Una de las principales actuaciones sobre el terreno será, según el documento elaborado por la consultora Mediotec, la construcción de una balsa para almacenar agua en la cima del Coto Novelle, a casi 700 metros sobre el nivel del mar. La orilla del embalse de Castrelo se encuentra a menos de 100 metros, según la cartografía del Instituto Geográfico Nacional, lo que supondrá un desnivel de unos 600 metros.
La balsa podrá contener alrededor de 1,36 hectómetros cúbicos de agua. Además, ocupará una superficie de casi 22 hectáreas. Los datos son reveladores sobre la entidad del proyecto del Grupo Cuerva: este depósito tendrá dimensiones cercanas a las de embalses como los de Santiago (Vilamartín de Valdeorras) o Cachamuíña (Pereiro de Aguiar).
La electricidad generada por la planta reversible será evacuada a través de una subestación exterior situada cerca del estanque. Desde allí se desplazará por cable aéreo hasta la subestación de Castrelo, propiedad de Red eléctrica de España y ubicado junto a la presa del embalse.
En cualquier caso, la planta deberá superar el procedimiento ambiental. De momento, la documentación del proyecto se podrá consultar en la sede electrónica del Ministerio hasta el próximo 13 de octubre.