En una semana se ha pasado de la peor ola de calor del verano a un inicio de otoño. De un día para otro, las mínimas bajaron bruscamente diez grados el pasado sábado y pese a que en los últimos días se habían recuperado temperaturas más propias de esta época del año, para este El primer fin de semana de septiembre se pronostica un nuevo descenso, que irá acompañado de tormentas en Castilla y León que por agua pasarán las fiestas patronales de varios municipios, entre ellos las ciudades de Valladolid y Palencia.
Durante el fin de semana se espera la formación de una depresión aislada en niveles altos (DANA) sobre el oeste peninsular, provocando una situación de inestabilidad con precipitaciones y tormentas abundantes y generalizadas. De cara a este sábado, el Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anticipa que la mayor probabilidad de fuertes lluvias y tormentas se limitarán al cuadrante nororiental peninsular y mañana se desplazarán hacia la zona central y tercio sureste.
Así, todas las provincias de Castilla y León se encuentran hoy en alerta por fuertes tormentas entre las once de la mañana y las once de la noche que podrían dejar acumulaciones de hasta 30 milímetros en una hora y estar acompañado de granizo. Serán más generalizados durante la tarde y más frecuentes en el este y sur y en las zonas de montaña en general.
Asimismo, se espera una marcada disminución del mercurio. Las temperaturas bajarán de forma generalizada y brusca este sábado, especialmente en la máxima, que no superará los 27 grados en las ciudades.
Mañana domingo continúa la alerta por tormentas y ráfagas de viento de hasta ochenta kilómetros por hora en Ávila, Burgos, Soria, Valladolid y Segovia. Temperaturas mínimas con pocos cambios y máximas en ascenso en el este y sin cambios o en descenso en el resto