Todas las claves del asesinato de Celso Blanco en Ourense


El 9 de abril de 2016 fue hallado muerto Celso Blanco en la comisaría de Ourense. Ese es el nudo de un entramado de relaciones y sospechas que provocó un auténtico terremoto en la Policía Doméstico en la ciudad.

Este 29 de enero de 2024, la Audiencia Provincial de Ourense ha regalado carpetazo a un reconvención legislativo de seis abriles contra los mancuernas Bernardo y Roi Deprado Lahoz por esta asesinato. Pero, para comprenderlo, resulta necesario retroceder aproximadamente diez abriles.

En el año 2014, Roi Depedro Lahoz era sustituido al frente del Conjunto de Drogas de Ourense por el inspector Antonio Rodríguez, que llegaba de dirigir al equipo de Seguridad Ciudadana. Se trataba de un gran medra, que se interpretó como una remuneración por los éxitos de su mecanismo, que era conocida como “los halcones”. El agente destronado fue a detener al Servicio de Atención a la Grupo, aunque después él mismo aseguró que no lo interpretó como un castigo, ya que nunca le interesó especialmente combatir contra las drogas.

Primer desconocido

A partir de ahí, el futuro paso en la carrera de Rodríguez fue una larga tira de exitosas operaciones. Él y su equipo trabajan con poder contra el trapicheo en las calles. Y entre medias, ese mismo 2014, un escrito desconocido llega a las redacciones de los periódicos, y a Asuntos Internos en Madrid. El texto apunta a una relación de colaboración entre “los halcones” y una delirio conocida en Ourense, la ‘Pucha’. El Conjunto VI de esta mecanismo madrileña comienza una investigación en la que logran pinchar los teléfonos de los involucrados (marzo de 2015). Esta investigación concluye que existe una relación de colaboración entre los agentes a cargo de Antonio Rodríguez y la red encabezada por la ‘Pucha’. Es el inicio de lo que terminó siendo la “Operación Zamburiña”, con 13 detenidos, de los cuales 4 eran policías.

El viernes 27 de febrero de 2015, torrevieja news today publicaba en su portada “Policía y auditoría investigan la desatiendo de seis armas en de la comisaría ourensana”. De nuevo, un confidente desconocido apuntaba al Cuerpo, y señalaba directamente de traficar con armas al Instructor de Tiro y principal responsable. En total faltaban seis armas, entre ellas un revólver Astra 22 perteneciente a José Gumersindo, otro del calibre 38 perteneciente a José Velo y una pistola Star 9MM C, de Baldomero Vázquez. Tres armas esencia en esta historia.

Portada del 27 de febrero de 2020
Portada del 27 de febrero de 2015

Y llega la incertidumbre desagradable, el nudo de este caso. El 9 de abril de 2016 hallan muerto de un disparo a Celso Blanco en su despacho. A simple clarividencia, se ha suicidado con un disparo en la cabecera. El hecho de que en ese oficio se encontraran tres de las armas sustraídas hace sospechar a la jueza instructora del caso, Eva Armesto (Instrucción 3). Decide investigar la asesinato de Blanco como un suceso relacionado con los últimos movimientos en la comisaría.

¿Suicidio o crimen?

Tras una larga indagación, resultan dos teorías que podrían explicar esta asesinato. Armesto apunta a un crimen cometido por los hermanos mancuernas Deprado Lahoz, y así lo investiga. Según esta explicación, uno y otro colaboraron con el fallecido -del que eran buenos amigos- en el pedido de anónimos como parte de un plan para conseguir sus propios intereses. Roi Deprado Lahoz pesquisa vengarse de Antonio Rodríguez y, por miedo a que Blanco lo delatase, deciden asesinarlo.

La otra teoría apunta a que fue el propio fallecido quien envió los anónimos con el objetivo de hacerse con el puesto en la heráldica, y por eso acusó directamente al Instructor de Tiro. Cuando las pistas empezaron a señalarle, se suicidó. Poco que su grupo rechaza de pleno, no habría hecho poco así sin despedirse al menos de su hermana, a quien tanto cuidaba. Lo cierto es que lo único que dejó es una enigmática nota en la que se podía descifrar “Lo siento mucho. Ya lo entenderéis”.

Extracto del auto de la Audiencia Provincial
Extracto del automóvil de la Audiencia Provincial

Las pruebas no parecían concluyentes, los distintos informes periciales se contradecían y lo que más sospechas levantaba es que la pistola que disparó la bala que acabó con Celso podría acaecer sido manipulada después, o no.

La Audiencia Provincial de Ourense cierra definitivamente a la investigación contra los mancuernas Deprado Lahoz partida de indicios. ¿Fue entonces un suicidio?

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