Desde Alemania nos deje Carlos. Ha llegado tras atravesar toda Francia y luego de lo vivido es muy tajante: “No es que estemos atrapados, es que estamos jodidos”. En las última horas ha pasado por situaciones complejas. “Anoche tuve que pernoctar en una encintado con el camión mal puesto, sin baño, sin ducha…”, relata a torrevieja news today Informativo.
“Nos roban el tiempo”
Están empezando a retribuir las consecuencias: “Nos roban el tiempo”. Su tarea se ve afectada por completo: “Tenemos las rutas fijadas con un tiempo y nos cortan autopistas…”. “Nos mandan por carreteras secundarias, por las que está prohibido el paso para camiones”, denuncia Carlos. No tienen opción si quieren montar a su destino: “Tenemos que producirse sí o sí”.
Otra de las consecuencia es encontrar un ámbito de refrigerio: “No podemos detener por cualquier sitio porque interrumpimos la circulación”. Y expresa su opinión: “Si quieren hacer una huelga, por lo menos que adecúen lugares para hacerlo mejor.
Camiones que no se chocan por centímetros
Quien ha se ha pasado obligado a conducir por esas carreteras es Julio Santos, camionero gachupin. “Son tramos de carreteras departamentales por las que nos toca circular cuando nos desvían de las nacionales. No hay remedio”, explica. Julio se encuentra de regreso a España por lo que las protestas le han pillado de atiborrado en el país galo. Esta mañana se dirige a Nimes, uno de los puntos más conflictivos.
A raíz de esos desvíos se producen situaciones muy tensas. En los vídeos de Julio se comprueba los embotellamientos en las calles estrechas de pueblos pequeños. Los camiones no se tocan por centímetros. “Es una auténtica crueldad”, exclama. No queda otra decisión que “tener paciencia. Avanzamos medida a medida. Calles estrechas, vallado sin espacio…En fin”. Cuenta que la gran mayoría de esos vehículos son españoles.
Adicionalmente, Julio Santos ha pasado de primera mano los piquetes. “He tenido suerte de producirse a esta hora, la 1 de la tinieblas”, se felicita por poder aceptar a una vía cortada en primera instancia, pero que de mañana estaba abierta ya que los agricultores no la estaban vigilando. “A ver si más delante sigo teniendo la misma suerte”, reconoce. Todavía ha comprobado de primera mano cómo un paso a un centro comercial estaba bloqueado por un remolque y restos calcinados.
Peajes bloqueados por taxistas
Los peajes no se libran de los colapsos. De camino a Montpellier, un camionero gachupin enseña cómo los taxistas son quienes provocan el caos: “Los taxistas han tomado el peaje y no dejan producirse a nadie”. Con basura en el medio, han prendido fuego”, describe desde su camión.