Los trabajadores de la cabrestante municipal de Mataró (Maresme), adscritos a la empresa Promocions Urbanístiques de Mataró (Pumsa), denuncian que como consecuencia del colapso de los depósitos de coches retirados, se ven obligados a dejar los vehículos que enganchan estacionados en las calles. El Cabildo, según admitió la concejal de Mataró Segura, Núria Pardo, articula soluciones como aligerar los trámites para el desguace, pero además anuncia tolerancia cero para aquellos vehículos infractores de la norma de circulación.
El Cabildo de Mataró contaba hasta ahora con dos depósitos para estacionar los vehículos que retiraba la cabrestante. Uno sito en la segunda planta del parking del Palau y otro en la Ronda Rafael Estrany. El primero, según denuncian los operarios de la cabrestante, ahora se utiliza como estacionamiento de vehículos en rotación, lo que ha propiciado el colapso del segundo depósito. “Nos dicen que dejemos los coches que hemos aferrado en cualquier calle” denuncian los trabajadores. Una orden que juzgan “ilegal y peligrosa”, ya que si un coche, mientras está en custodia municipal, es vandalizado o robado “el responsable es el Cabildo”. Los operarios informan que actualmente “dos de cada tres coches retirados por la cabrestante se quedan fuera del depósito” lo que además entienden como una infracción de las normativas: “los coches son propiedades privadas que hay que preservar” aseveran.
Tensión entre trabajadores y empresa
En la contemporaneidad, el conflicto con los trabajadores enfrenta a los sindicatos y la empresa municipal, una lucha que provoca tensiones que en muchos casos derivan en bajas laborales. En ota coyuntura detallan que en la plantilla “ha habido seis trabajadores de disminución y el servicio de cabrestante no se ha podido cubrir con personal de la casa” por lo que Pumsa se ha conocido obligada a realizar la retirada de vehículos con grúas de arriendo.
Por su parte, el gobierno municipal admite “la requisito de liberar espacios de estacionamiento” y atribuye el colapso al gran número de vehículos abandonados y que quedan a disposición legislativo, una situación que puede sostener el transporte inmovilizado entre cinco y 15 primaveras, lo que agrava el problema en el aparcamiento municipal. Actualmente, en la Ronda Estrany se depositan los vehículos retirados por una infracción de tráfico y en el del Palau se dejaban los abandonados y que están en proceso legislativo. Aquellos que debían ser desguazados se dejan en el aparcamiento provisional frente al Hospital, irresoluto de la ampliación del centro váter.
La nueva cabrestante que ha entrado en servicio en Mataró
“Problemas de depósitos colapsados siempre ha habido” reconocen fuentes oficiales del servicio de Vía Pública del Cabildo de Mataró. De ahí que en la contemporaneidad se estén revisando los criterios para la operativa policial y actualizando la decreto de movilidad. En la misma cuerda, revisan el procedimiento para acortar los plazos para custodiar el transporte afectados por una orden legislativo. Adicionalmente, el nuevo convenio con el proveedor de desguaces obliga al adjudicatario a disponer de un espacio de leve 100 plazas para depositar este tipo de vehículos. En paralelo, el gobierno municipal trabaja en engrosar el equipo oficial para aligerar los expedientes de retirada y la documentación relacionada con los depósitos de vehículos. Igualmente, incidirán en la descuido de rotación de vehículos que superen el mayor permitido para estacionar en una misma plaza.
En otro orden, el gobierno municipal ha impulsado una nueva tasa para los coches que sean retirados como consecuencia de “fuerza viejo” o por la celebración de acontecimientos públicos, como mercados sedentarios, “para lo que se avisa con rotulación específica con 48 horas de delantera”. Los coches que deban ser retirados, pese a estar estacionados correctamente, además deberán acreditar una nueva tasa.
Incremento de las sanciones
De igual forma, si un transporte es aferrado por la cabrestante y no lo llega a retirar porqué aparece el conductor, lo que hasta ahora sólo suponía una multa por mal estacionamiento, a partir de ahora “supondrá además el plazo de 90 euros por el enganche de la cabrestante”. Si en cambio el transporte es trasladado al depósito o al espacio donde lo haya estacionado el operario municipal “la correctivo será de 130 euros” más la multa correspondiente.
El Cabildo de Mataró ha adquirido dos vehículos de cabrestante nuevos que relegarán a los actuales como camiones de sustitución en caso de averías. Las actuales cuentan con los últimos dispositivos de enganche rápido y las últimas tecnologías.
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