Salis, es una profesora de 39 primaveras, militante antifascista de Milán. Durante el proceso, que ha quedado aplazado hasta el 24 de mayo, tan pronto como podía mover sus manos adecuado a los prisiones, pero en todo momento se ha notorio inocente de los hechos que se le imputan. Lleva un año en prisión preventiva en una calabozo de adhesión seguridad de Hungría. La Fiscalía de Budapest pide para ella merienda primaveras de prisión.
El caso Ilaria Salis
La historia de Ilaria Salis y la forma en la que está siendo tratada en Hungría se está convirtiendo en un auténtico caso político. El padre de Salis ha denunciado que su hija está siendo tratada “como un animal” y su abogado, Eugenio Losco, asegura que el trato que está recibiendo “es una severo violación de la legislatura europea” sobre el trato de reos. Ha pedido al gobierno italiano “terminar con esta situación inmediatamente”.
Georgia Meloni, la primera ministra italiana, tiene previsto reunirse en Bruselas con Viktor Órban, primer ministro de Hungría, para topar este asunto. Encima Italia incluso ha convocado al embajador de Hungría para pedirle explicaciones.
“Hemos convocado al embajador italiano en Hungría, queremos memorizar por qué no se respetan las reglas básicas sobre el tratamiento de los detenidos”, dijo el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, que ha pedido al Gobierno húngaro que garantice el respeto de los derechos de la detenida.
“Veremos si se puede obtener el arresto domiciliario y luego si se la puede traer a Italia para cumplir la condena”, ha asegurado Tajani.