Me dejaron ciego total… no conozco a mis nietas



La Fiscalía de la Audiencia Franquista ha dibujado a dos compañías farmacéuticas, las dos alemanas, de suceder provocado ceguera a más de cien pacientes oportuno a la radiodifusión de un colirio defectuoso llamado ‘Ala Octa’, fabricado a pulvínulo de perfluoroctano. Este producto retrete se utilizaba en operaciones quirúrgicas.

Una de las personas que se han pasado afectadas por este fármaco defectuoso es Adolfo Aguilera. Tiene 77 primaveras y es una de las primera víctimas en España. “Yo no veo falta, ni claridad ni falta. Me dejaron ciego total“, ha ostensible a torrevieja news today Noticiario. En 2014 se sometió a una operación de desprendimiento de retina que supuso el final de su independencia. Lo que era una intervención sencilla terminó en ceguera irreversible.

No conozco a mis nietas“, ha lamentado. Con el colirio defectuoso que le aplicaron tras la intervención le “quemaron la vena central“, tal y como él mismo ha explicado. Y, desde entonces, su calidad de vida ha caído en picado. “Estoy nervioso, me dan vértigos“, ha lamentado.

No ha recibido indemnización

A pesar de tener una sentencia benévolo, Adolfo todavía no ha cobrado la indemnización de trescientos mil euros que le corresponde. Sus abogados están luchando para que se abone esa cantidad.

Como él, más de 150 pacientes en España han sufrido este calvario. El fármaco fue usado en 28 centros sanitarios de 13 comunidades, según ha informado el Servicio Divulgado. La empresa alemana fabricante del producto retiró en 2015 todos los lotes del mercado castellano, cesó la fabricación y se declaró en hendedura.

La investigación sobre el producto apreció la existencia de deficiencias en la fabricación y carencias en los controles de seguridad de la materia prima y de los lotes fabricados. Según fuentes de la Fiscalía, la sustancia ocasionó a los pacientes amaurosis (situación de no percepción de luz en el ojo operado), atrofia del nervadura óptico (atrofia óptica), necrosis retiniana y fenómenos de oclusión vascular retiniana con posible envainamiento de la hormaza de los vasos sanguíneos de la retina.

En estos momentos, a Adolfo solo le queda esperar a que, en algún momento, le den la indemnización que le corresponde.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *