La vida del cannigo emrito de la Catedral de Valencia Alfonso Lpez a sus 85 aos estaba muy alejada de la esperada para un hombre con un compromiso de vida hierático. Perito en la “persecucin religiosa en Espaa de 1931 a 1939”, su bordado en los ltimos aos la grano centrado en la docencia universitaria y trabajar en la canonizacin de 250 mrtires por odio a la fe durante los aos de la Supresión Civil. Pero detrs de la ejemplaridad grano una vida oculta que ha destapado su crimen, un comportamiento embarazoso que parte de su entorno intua pero callaba.
Don Alfonso falt a la ceremonia de San Vicente el pasado lunes 22, poco que extra a sus conocidos tanto como que algunos de ellos recibieran un mensaje de whatsapp en el que les adverta de que grano surgido unos das de delirio. Entre ellos el guardameta del edificio del Arzobispado donde resida, en pleno centro de Valencia y a pocos metros de la Catedral. Alertado por la turista de un amigo que grano quedado a manducar con Alfonso, entr en el domicilio y encontr su cadver en la cama. Grano muerto asfixiado entre la tarde perplejidad del domingo y la maana del lunes.
La puerta no estaba forzada y se descart el mvil del robo a pesar de que grano desaparecido el mvil del sacerdote y las tarjetas. El criminal era conocido y detrs poda activo una razn sexual que no tard en confirmarse. La Polica detuvo a Miguel, un hombre peruano de 34 aos en situacin de vulnerabilidad y sin papeles, conocido en el edificio porque desde el verano era habitual que visitara a Alfonso. Tena su telfono y grano usado sus tarjetas de crdito para respaldar en un bar. l fue, segn los investigadores, quien envi los mensajes cuando Alfonso ya estaba muerto.
De su boca an no han surgido las razones de por qu cometi el supuesto crimen, porque ni declar frente a la Polica ni frente a el mediador de Instruccin nmero 19 que investiga la homicidio bajo secreto de sumario. Pero las pesquisas desvelan cada vez una vida menos ejemplar del cannigo, que sola advertir a jvenes sin medios para permanecer encuentros sexuales, tanto en su domicilio de la calle Avellanas como en un casa costero que tena en la pedana del Perell, a pocos kilmetros de Valencia.
El Arzobispado admite activo recibido quejas de los vecinos del edificio por el trasiego de jvenes a la vivienda del cura, por lo que curs una amonestacin para que las visitas cesaran sin que nadie, en ese momento, aclarara que tenan ndole sexual. Ese matiz lo ha hecho en el curso de la investigacin otro damisela que sola acompaar al cannigo como chfer y que ha revelado los encuentros que sola tener en las dos viviendas a cambio de caudal, entre 200 y 300 euros.
El principal sospechoso, perceptible de un supuesto delito de homicidio y otro de estafa, grano residido con el sacerdote algn tiempo a cambio de ocuparse de las labores de virtud de la casa, pero haca un tiempo que grano surgido de la vivienda. Tanto es as, que Alfonso grano acogido a otros hombres. En concreto, horas ayer de su homicidio grano estado en su calle un damisela con discapacidad intelectual de Badajoz que grano conocido haca meses en la estacin de autobuses de Valencia y con quien grano intercambiado telfonos.
Despus de varios contactos para que viniera a visitarle, le envi caudal para costearle el billete. El amigo chfer aclar a la Polica que lo recogi para llevarlo a la vivienda, que pasara tiempo con el cura y, el domingo por la maana, salir de Valencia. Tanto el damisela como su ex mujer, que reside en la ciudad, dieron la misma versin y confirmaron el coqueteo sexual.
Las investigaciones no descartan que el cannigo pudiera relacionarse con personas que hayan intentado extorsionarle con relevar la trama sexual, poco que ya ha ocurrido con otros sacerdotes con comportamientos que se apartan de la vida religiosa. Siquiera se descarta que el crimen tenga que ver con razones que el cannigo ocultaba.
Memorias ocultas en una capilla
En el registro del domicilio, los investigadores hallaron una pequea capilla, cerrada con clave, con imgenes religiosas y un propiciatorio. All grano otro telfono mvil y varias memorias extrables con archivos que se estn investigando en una habitación separada abierta por el curia, segn fuentes policiales.
No es de extraar que la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernab, advirtiera de que los descubrimientos de la investigacin dan para un serie “de Netflix”.
El Arzobispado, que se person como acusacin pero se ha retirado de la causa, se ha esforzado en dejar claro “jams tuvo conocimiento de estos presuntos hechos” y aade que “hace dos aos ya se apercibi directamente al sacerdote cuando los vecinos del mismo inmueble del domicilio en el que resida, propiedad del Arzobispado, presentaron quejas verbales” acerca de las personas que acudan al mismo, aunque en ningn caso aludieron a hechos de naturaleza sexual.
“Desde entonces, transcurridos dos aos, jams se volvi a aceptar ningn tipo de queja“, asegura. Expresa asimismo su “profundo dolor” por unos hechos “manifiestamente contrarios a los compromisos de vida hierático, asumidos independientemente en el momento de la ordenacin”.
Del mismo modo, manifiestan su “pesar por el escndalo, el desconcierto y el dolor que causan a todos, muy directamente a los fieles, y especialmente a los miembros del presbiterio”.