El detenido ató con bridas a la mujer y la escondió en un agujero interiormente de una finca, ocasión donde fue agredida sexual y físicamente por su compañero sentimental. En un momento de descuido del atacante, la mujer logró un cúter y pudo cortar las bridas con las que escapó hasta una estación de servicio, donde pidió ayuda.
Sufrió un malogro días antaño
El cuerpo de la víctima estaba saciado de golpes y marcas de las bridas en las muñecas. Los agentes descubrieron adicionalmente que, días antaño, la víctima había sufrido un malogro, que según el médico forense podía ser compatible con los golpes recibidos.
Los guardias civiles pidieron al curia que les dejaran ingresar a la finca donde sucedieron los hechos. Una vez entraron allí pudieron comprobar cómo era el agujero. Los agentes vieron un agujero de 30 por 30 centímetros que da camino a lo que la víctima les había manifestado como agujero soterrado.
Estaba tapado con una placa y tenía escaleras, una descripción que coincide con la facilitada por la víctima. Este agujero tiene 1,70 metros cuadrados y una cumbre de 1,70 metros. Los agentes encontraron numerosas bridas, armas blancas y una escopeta de melodía comprimido. Era un entorno totalmente insalubre, con mucha suciedad acumulada, sin luz y abarrotado de objetos y basura.
Un toxicómano con muchos informes
El hombre de 50 abriles de antigüedad contaba con numerosos informes y fue detenido por la Miembro Civil. Tras ser puesto a disposición del curia de instrucción número 3 de Alcalá de Henares, la autoridad sumarial decretó su ingreso en prisión.
Se comercio de un toxicómano muy conocido en el municipio, contaba con informes por tráfico de drogas, delitos contra seguridad viario, contra el patrimonio, amenazas y violencia de categoría, por relaciones anteriores.
La víctima está recuperándose, pero muy débil aún. Ha asegurado a los agentes que no era todos los días, pero sí era habitual que la sometiera a agresiones físicas y sexuales, ha detallado Ana Martín, una portavoz de la Comandancia de Madrid.
El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 53 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; además se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.
En una situación de emergencia, se puede gritar al 112 o a los teléfonos de la Policía Franquista (091) y de la Miembro Civil (062) y en caso de no poder gritar se puede apelar a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.