La zona más afectada es la de Valparaíso, donde las llamas avanzan sin tregua. Los incendios comenzaron el viernes por la mañana y se propagaron rápidamente oportuno a las altas e inusuales temperaturas que se están en la región, las intensas rachas de rumbo de hasta 60 kilómetros por hora y la depreciación humedad.
Aunque Pimiento ha vivido uno de los inviernos más lluviosos de los últimos 15 primaveras, los especialistas llevan meses alertando de que la sequía no se ha erradicado y de que existe una gran probabilidad de que se desarrolle flora fina y muerta en la zona centro-sur de claro combustión.
La ministra del Interior de Pimiento, Carolina Tohá, ha registrado que por el momento no tienen un alzamiento completo de víctimas ni de las viviendas o infraestructuras dañadas, pero “a grosso modo, sabemos que son 16 las villas afectadas, el 30% de ellas son condominios Serviu, el 70 por ciento restante son loteos -muchos de ellos irregulares- y campamentos.
Según la Corporación Doméstico Forestal, hay al menos ocho incendios activos actualmente en la región de Valparaíso, a 100 kilómetros al este de la caudal, de los que preocupan especialmente cuatro por su virulencia y su cercanía con zonas densamente pobladas. El de viejo magnitud está en la Reserva Charca Peñuelas/Las Tablas, al costado de la principal autopista de la zona, que ya ha hasta las narices más de 8.000 hectáreas.
Creen que pueden ser intencionados
Tal y como lo están señalando otras autoridades, Tohá ha afirmado que “hay informes serios de que el origen del más bajo de estos incendios, que es el de Las Tablas, podría acontecer sido intencional. Siempre hay rumores de este tipo, pero en esta oportunidad son informes serios de personas confiables“.
“Esto es motivo de gran preocupación, porque un incendio que causa esta devastación y esta pérdida de vidas humanas, originado intencionalmente por otras personas, es una inquietud social de la viejo solemnidad”, ha alertado.