Entre la clientela lo tienen claro, son mejores precios que los se encuentran en los supermercados. Con la inflación por las nubes, ellos reconocen que su producto está muy caro e intentan ajustar al mayor los precios. O al menos eso es lo que ha tenido que hacer para prolongar las ventas Iñaki.
Tiene un puesto de encurtidos y en el posterior mes las aceitunas le ha subido semana tras semana. Ahora el kilo de las “chupadedos”, las más populares entre su clientela se venden a más de 10 euros. Reconoce que ahora los clientes tienen que comprarle menos porque productos más básicos como las hortalizas se han encarecido por encima del 13% (13,6 euros/kilo) y la fruta casi un 12 (11,8%).
Ofertas en productos de temporada
Buscamos uno de los productos de temporada, la alcacil. Dos kilos a 4,99 euros. Aquí la diferencia de precio con cualquier supermercado se nota. Están asaz más baratas. “Una de las clientas repite, las compré el domingo pasado y hoy me las vuelvo a transigir”, nos cuenta un mercader.