La remisión, foco de todas las críticas
Sobre la ley de remisión, uno y otro han coincidido, inicia un camino del que será muy difícil retornar. La presidenta de la Comunidad de Madrid asegura que se han roto “todas las reglas”. E incluso, dice, que de seguir así y no poner límites, se podría lograr a una situación como la de Venezuela. Cree que se están cometiendo “todo tipo de atropellos” contra los letrados del Congreso, la Fiscalía, la Unión Europea y los jueces.
Dice Ayuso adicionalmente que estas acciones fracturan la sociedad y llevan “los males de la política catalana” a España entera. Poco en lo que ha coincidido el expresidente del Gobierno, José María Aznar, que ha reprochado al flagrante presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sus declaraciones defendiendo que el independentismo no es terrorismo. Cree que el próximo paso será el derecho a la autodeterminación.
El problema de la sequía
Sobre la desidia de agua que afecta a Cataluña Aznar ha recordado el plan hidrológico doméstico que propuso en 2001. Asegura que en ese plan se conectaban todas las cuencas de España a través de Barcelona, y que aunque fue aceptado e iba a ser financiado por la UE fue suspendido cuando José Luis Rodríguez Zapatero llegó a la Moncloa. Cree que es “un tema cardinal”, y que es necesario pactar un plan a nivel doméstico, ya que el agua “no puede insultar” y hay que “compartirla”.
Y mientras Aznar pone el foco sobre Zapatero en esta problemática, Ayuso lo hace sobre el nacionalismo. Se pregunta qué ha hecho Cataluña estos abriles para evitar la sequía. Asegura que los nacionalistas están “empobreciendo regiones enteras de España” y que mientras Madrid ha invertido en mejorar las infraestructuras Cataluña pierde el 15% del agua que embalsa.