Este esforzado incremento del número de ayudas tiene su razón de ser en el incremento de las deposición de las familias y transeúntes que reflejan sus registros. Si en 2023 fueron 608 las personas que se beneficiaron con el apoyo de Cáritas, un año antaño eran 541. Llegados a este punto, hay que recapacitar que sólo en 2021, el registro aumentaba con los inscritos en las 99 altas contabilizadas.
En el caso concreto de los transeúntes que recurrieron a la sede de la Praza do Príncipe sucedió todo lo contrario, pues pasaron de los 42 contabilizados a lo derrochador de 2022 hasta los 37 del año pasado.
De las 27 nacionalidades que recurrieron a las instalaciones de la calle Balorca durante el pasado examen, el más importante es el colombiano, con 145 personas. Otros grupos numerosos son el gachupin, con 113, y el marroquí (111). Venezuela (80), Honduras (41) y Brasil (24) son otros países con presencia importante en las anotaciones de la entidad benéfica. En total, en este registro están presentes 27 países.
Campañas
Una vez cerradas las campañas solidarias que se desarrollaron a finales de 2023, Cáritas indicó la entrada de 2.899 kilos de alimentos en sus instalaciones. “La gentío colaboró”, comentó Isabel Álvarez al valorar la respuesta de iniciativas como la Carreira do Turrón o el triangular de fútbol, así como iniciativas desarrolladas en centros educativos como el colegio Divina Pastora de O Barco o el rues Pablo VI. Una solidaridad que quedaría coja si no se le suman los alimentos de la Operación Kilo, en la que participaron establecimientos comerciales de la villa. La trabajadora social incluso resaltó el apoyo que recibe del Tira de Alimentos de Ourense. De la capitalidad provincial llegaban 5.200 kilos de productos alimenticios en octubre, antaño del inicio de las campañas de finales de año.
Ayudas para emergencia social
El capítulo de emergencia social, denominación dada a los problemas que un buen número de familias tiene para afrontar el cuota de los recibos de la luz, el agua o el inquilinato vuelve a centrar buena parte de la atención de Cáritas en O Barco. En los últimos meses, este apartado recibió una importante ayuda en las donaciones de la Fundación Amancio Ortega. El total que viene recibiendo la ONG de la diócesis de Astorga para ayudar a las familias barquenses que pasan apuros a la hora de enriquecer sus recibos se aproxima a los 4.000 euros anuales, una donación que permite evitar los avisos de cortes de luz, traída o el impago del arrendamiento.
Por otra parte, Cáritas persigue ofrecer una atención más próxima a las familias necesitadas de A Rúa y Petín. Con esta finalidad, el prelado de Astorga, Jesús Fernández, dio luz verde recientemente a la constitución de una delegación ruesa, cuya sede estará en la casa parroquial de Petín. Los promotores de esta iniciativa aún trabajan en la coordinación del nuevo servicio y, en un principio, está previsto que la trabajadora social de O Barco se desplace hasta las instalaciones petinesas una vez a la semana. Ya en relato al resto de jornadas, de ellas se ocuparán voluntarios.