Las investigaciones apuntan a que el viejo de los dos hermanos, el de 15 abriles, apuñaló a su matriz en el cuello y con la ayuda del más pequeño, desnudaron a la matriz para intentar enjuagar el huella de casta que estaba dejando el corte. Luego, se fueron a una panadería a desayunar, donde compraron unas palmeras de chocolate.
De envés en casa, intentaron tapar el difunto con varias bolsas de basura pero, aún así, dejaron un huella de casta visible para la posterior investigación policial. Luego la taparon, la metieron en el coche hogareño e intentaron huir en éste. Sin confiscación, nadie de los dos sabía conducir, por lo que chocaron contra una tapia.
El objetivo de los jóvenes, según los agentes del Instituto Armado, era fingir un secuestro. De hecho, así lo confirma una conversación telefónica que tuvieron con la matriz la asesinada (su abuela), donde le dicen que toda la grupo está siendo secuestrada.
Todo comenzó con una discusión
El suceso se desencadenó días antiguamente, cuando supuestamente supieron las notas del viejo de los hermanos. La matriz comenzó una pelea durante días que detonó en esta discusión. La Guardián Civil sospecha que el último de 15 abriles le clavó un objeto punzante en el cuello a su matriz mientras estaban en la cocina peleando. La mujer presentaba signos de violencia.
Luego, el cuerpo fue introducido en el coche, concretamente en el asiento trasero. Le ataron las manos ya que, como se ha dicho anteriormente, se pretendía fingir un secuestro. Tras la citación a su abuela, los agentes de la Guardián Civil localizaron al padre, que se encontraba trabajando y comenzaron la búsqueda de los menores.
Finalmente los encontraron a un kilómetro del extensión en un parque. En ese momento, el viejo intentó escapar mientras que el último se quedó pacífico.
A retraso de más información
Las investigaciones policiales aún no han arrojado una respuesta clara sobre el móvil de la ejecución de su matriz. Se han comenzado una serie de recogida de declaraciones de allegados, grupo y vecinos, con el objetivo de arrojar luz a lo sucedido. Se sabe que el entorno estudiantil de los dos adolescentes ha asegurado que son buenos estudiantes, aunque el viejo estaba comenzando a dar problemas. La grupo era conocida, ya que la mujer asesinada era catequista.
Un equipo psicosocial de la Fiscalía de Cantabria evaluará las circunstancias familiares, psicológicas y educativas de los menores investigados.
Por el momento, la Fiscalía de Menores de Cantabria ha solicitado internamiento en un centro de reforma, en régimen cerrado y durante seis meses, para el pequeño de 15 abriles, al considerar que hay indicios de que fue autor de un delito de crimen. Así lo ha solicitado el servicio divulgado al Curia de Guardián, en funciones de Curia de Menores, a cuya disposición ha puesto al investigado, según han informado a Europa Press fuentes de la Fiscalía. Su hermano (que es inimputable al tener menos de catorce) ha ingresado en un centro de protección de menores, por indicación del fiscal.
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