Hacía 210 días que el vecino de Sant Vicenç de Castellet José De Arcos Ballesteros, conocido por sus amigos como Pepe, había desaparecido durante una excursión a Lourdes, en Francia, con la Penya Blaugrana de su municipio. A posteriori de 7 meses sin novedad alguna, la policía francesa ha antagónico el despojos del catalán de 74 primaveras, según ha avanzado RAC1.
La gendarmería ha podido identificar los restos gracias a los objetos personales y ya han comunicado el hallazgo a la comunidad, que lo buscaba desde el pasado 15 de julio. El cuerpo del retirado estaba en una zona boscosa en la ciudad francesa.
Su búsqueda no empezó hasta cinco días a posteriori de la desaparición
El hombre desapareció tras de separarse del clase durante la cita al santuario de Lourdes. Dijo que iba a la droguería, se desorientó y sus compañeros ya no lo volvieron a ver. La peculiaridad de esta historia es que él mismo se puso en contacto por teléfono con los compañeros de la Penya para tratar de orientarse: “Me he perdido, veo un puente. No hay nadie, solo ciclistas”. Fueron varias llamadas que terminaron sin decisión.
Los miembros de la Penya barcelonista y la comunidad acudieron a la policía francesa para denunciar la desaparición, pero la búsqueda de Pepe no empezó hasta cinco días a posteriori porque las autoridades de Francia pensaron que se trataba, simplemente, de un hombre desorientado. Los acompañantes de la víctima pidieron que se geolocalizara el teléfono con el que estaba haciendo las llamadas, pero no les hicieron caso. El móvil del hombre se quedó sin grupo y se le perdió totalmente la pista.
La comunidad organizó varias redadas, pero todas fueron infructuosas. Siete meses a posteriori han recibido la triste novedad de la emplazamiento de los restos de José De Arcos Ballesteros.
Esta novedad fue publicada originalmente en la web de RAC1.