El Fulión do Tameirón, seguido de la agrupación de Grixoa fueron los encargados de aclarar el desfile a las 11,30 horas. Casi cuatro horas luego, era el Fulión de Fradelo el encargado de poner el punto final al itinerario en el que participaron un total de 23 agrupaciones. Entre ellas, el Fulión do Mango da Vila, Fornelos de Cova, Punxeiro, Fornelos de Filloás, Quintela do Pando, Grixoa o la Asociación Xuntos polo Fulión de Vilariño de Conso.
Tras el espectáculo, llegó el momento del comilona y como lleva haciéndose desde hace más de medio siglo, la androlla se convirtió en la reina de la mesa. Divididos los comensales entre el Pabellón Municipal y el Campo da Feira, fueron casi 3.000 los comensales que disfrutaron de este manjar.
Un rico consomé calentaba el cuerpo para dar paso al entredos por excelencia de este concello del Sierra Central. Acompañada de lacón, chorizo, grelos y patatas, la androlla afinó el paladar de los allí presentes. Tras ella, cordero asado de los ganaderos de la zona acompañado de ensalada y bica conexo a los chupitos y el café finalizaron la comilona.
El festín se alargó hasta proporcionadamente entrada la tarde para dar paso a la música, y es que la Charanga Mekánica Rolling Band es la encargada de despedir este día “Abultado” en la Plaza Longevo haciendo danzar a vecinos y visitantes.