En el primer mes del año, se comercializaron en la provincia un total de 904 turismos de segunda mano, lo que supone un incremento de casi nada un 0,3% con respecto al examen preliminar, según los datos hechos públicos por las patronales de concesionarios, Faconauto, y de vendedores, Ganvam. De hecho, el aumento en el mercado de usados en la provincia se quedó muy remotamente de la media gallega, que se situó en el 6,5%. La número es tres veces superior a las matriculaciones de turismos y todoterreno, que fueron 273. En todo caso, las ventas de vehículos nuevos registraron un crecimiento mucho anciano, de un 35,5%.
Compañías de renting
En el conjunto de Galicia se vendieron poco más de 8.300 unidades de vehículos usados, un 6,5% más, muy por debajo de la media doméstico que se situó en un 15% con cerca de 156.000. Esta subida respondió principalmente a las operaciones procedentes de flotas corporativas. En concreto, las compañías de renting, que una vez acabados los contratos de arrendamiento venden los coches usados jóvenes en el mercado de ocasión, obtuvieron un 43% más de transacciones que en enero del año pasado.
Los modelos de entre 8 y 10 primaveras fueron los que más crecieron, con un incremento de las ventas de casi un 30%, y el amplio de las operaciones se sigue concentrando en los que tienen más de 15 primaveras, que representan el 40% de las ventas, y en los diésel, que suponen más de la fracción de las operaciones.
La decadencia media del transporte usado en España se situó en enero en 11,3 primaveras. “Es necesario poner en marcha medidas eficaces para frenar el envejecimiento del parque automovilístico”, apuntan las patronales, en relato a una táctica orientada a que achatarrar un coche rancio se convierta en más rentable que revenderlo en el mercado de segunda mano.