Eran minutos antes de las 23.30 horas del domingo cuando el coche en el que viajaba una familia de Alcorcón intentó cruzar la autovía M-507. Los cuatro integrantes acababan de salir de Aldea del Fresno, municipio del suroeste de la Comunidad de Madrid donde tienen una segunda residencia, pero nunca llegaron a su destino. El miedo, presuntamente, a los efectos que pudiera provocar la DANA en la zona de la región más afectada por el temporal los empujó a subir al vehículo con el objetivo de regresar a casa y ponerse a salvo. Pero el desarrollo de la gota fría frustró sus planes, y sólo lograron recorrer dos kilómetros cuando la fuerza virulenta del agua los golpeó, en el puente que cruza el Arroyo Grande, haciendo que el vehículo volcara y los dos padres de mediana edad desaparecieran. . y sus hijos, de 14 y 10 años.
El más joven, Ethan, sobrevivió durante casi ocho horas encaramado en la rama de un fresno al borde de una finca privada. Nadie explica el milagro. No saben cómo recorrió los más de tres kilómetros que separan el punto donde se perdió el auto hasta el borde de la finca donde fue encontrado, encaramado, sin soltarse, en la parte endeble del árbol; ni cómo logró vencer, sin ahogarse, la fuerza del río Alberche, cuyo caudal se multiplicó a consecuencia de las precipitaciones. Nadie se atreve a verbalizar cómo un niño, de sólo 10 años, encontró fuerzas para resistir una noche entera abrazado a esa pequeña rama que le hacía las veces de refugio.
Pero Ethan lo hizo, y cuando aún no había salido el sol sus gritos de ayuda alertaron a un vecino. Minutos después, agentes del equipo Roca de la Guardia Civil recogieron al menor y lo trasladaron al hospital Rey Juan Carlos de Móstoles, donde se reencontró con su madre y su hermana mayor, quienes también lograron salvar sus vidas tras el accidente. . En el momento en que se publicó este artículo, la Guardia Civil todavía buscaba a su padre, uno de los dos desaparecidos tras el paso de la DANA por la Comunidad de Madrid.
“Esta mañana estábamos desenterrando el auto, cuando nos informaron que un hombre escuchó gritos pidiendo ayuda. Ese hombre nos guía hasta la zona exacta de los gritos de auxilio”, dijo a torrevieja news today el capitán jefe de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Madrid (Usecic). Inmediatamente, el equipo se dirige hacia la zona marcada, casi al final de una finca privada, al otro lado de los ríos Alberche y Perales, ambos lindantes con la Aldea del Fresno.
«Era imposible cruzar a la otra orilla, el río estaba muy cargado. Era imposible, imposible cruzar, ni siquiera pudimos subir al barco; Y por tierra tuvimos que dar muchas vueltas y tampoco sabíamos si llegaríamos, tardaríamos mucho”, continúa el capitán, que horas antes había asistido en el rescate, también con vida, del niño. madre.
Zona en la que se encontraba el niño.
puente lavado
por la inundación
Zona donde fue encontrada la madre
puente de pedrera,
Barrido
por la inundación
Encontraron a la hermana a 500 m
puente lavado
por la inundación
puente de pedrera,
arrastrado por la inundación
Los agentes lograron contactar con el guardia de la finca El Santo, quien de inmediato llegó al lugar indicado. «Guiado por nosotros logra llegar. El niño estaba subido a una pequeña rama”, afirma el mando de la Guardia Civil, en conversaciones con torrevieja news today. Ethan estaba vivo, aunque por un momento el miedo se apoderó de los agentes. «Había estado gritando, pero hubo un momento en que el niño “Se quedó callado, no dijo nada. Temíamos lo peor después de tantas horas porque no contestaba: se había quedado dormido por el cansancio”, relata el capitán.
Ethan estaba a más de dos millas de donde desapareció el auto y a unos 500 metros de su madre. “Ya estoy aquí”, respondió el menor cuando el guardia volvió a preguntar por él. Los agentes y el guardia de la finca respiraron aliviados. Se encontraba, más allá de la hipotermia, en aparente buen estado, aunque cubierto de barro.
«No os voy a mentir, no pudimos más. No habíamos dormido en toda la noche, pensábamos que ya no lo íbamos a encontrar, pero sucedió. No sabemos cómo resistió pero sobrevivió casi ocho horas encima del ramal», admite el capitán de Usecic, reconociendo el esfuerzo de todo su equipo.
Unas horas antes, a medio kilómetro de distancia, cerca del puente de la Pedrera, agentes del Servicio de Montaña de la Guardia Civil localizaron a la madre de Ethan. “Estaba incluso más baja que el niño, pasando por las pistas de pádel, agarrada también a un árbol en medio del río”, desvela el responsable del operativo. «Los agentes se jugaron la vida, con cuerdas, para alcanzarla. Tuvimos que intentarlo, y la rescatamos viva”, afirma, aunque no quiere hablar del heroísmo de quienes pusieron en peligro su vida para salvar la de la mujer.
La Guardia Civil intenta desenterrar el coche familiar
Antes ya habían encontrado a la hija de 14 años, que salió por su propio pie, y se encontraba a sólo 500 metros del puente donde el vehículo quedó sumergido por el agua. “Los dos menores lograron escapar por el maletero, antes de que los padres bajaran del vehículo”, concluye el comandante, cuyos esfuerzos se centran ahora en localizar al padre de familia y al desaparecido en Villamanta. Los otros tres integrantes se recuperan de una hipotermia en el hospital Rey Juan Carlos.
El auto, el que estaban desenterrando cuando ocurrió el milagro, quedó reducido a un revoltijo de hierro y cubierto de barro, prueba de la fuerza de las torrenciales lluvias. Dos puentes fueron destruidos en este poblado sancionado e incomunicado tras la DANA. Allí, informa Pilar de la Cuesta, el Ministerio de Defensa instalará un puente provisional para intentar paliar los efectos del temporal.