Los vecinos del bloque agrietado de la calle Canigó no podrán volver hasta hacer unas obras


El corregidor de Badalona (Barcelonès Nord), Xavier García Albiol, ha explicado este jueves que los vecinos desalojados ayer de uno de los edificios adyacentes al que se derrumbó la semana pasada en la calle Canigó, en el que murieron tres personas, no podrán retornar hasta que no se lleven a angla unas obras.

El corregidor ha explicado que en la reunión que tuvo con los vecinos anoche a las 21.00 horas les trasladó que “no pueden entrar a existir en sus pisos hasta que no se hagan una serie de obras que garanticen que este monolito es seguro”.

Paso controlado para retirar bienes personales

Los vecinos del número 7 de la calle Canigó de Badalona tuvieron que ser desalojados ayer luego de que aparecieran grietas en algunos pisos, una semana luego de que el edificio del número 9 se derrumbara parcialmente y tres personas murieran sepultadas en los escombros.

Albiol ha afirmado que a partir de ahora trabajarán yuxtapuesto a los vecinos y la Generalitat para intentar que puedan retornar a sus casas lo antaño posible. Por otra parte, ha indicado que “es evidente de que hay un peligro de que se vuelva a hundir” el edificio agrietado, y ha expresado que los vecinos entrarán “hoy de forma ordenada a retirar objetos personales”.

Los bomberos llevan a cabo el desescombro de la finca de forma manual.

Los bomberos llevan a angla el desescombro de la finca de forma manual.

Bombers

El corregidor ha explicado que los pisos que se han apuntalado son “los de la parte reincorporación”, que son los más afectados por las grietas. En cuanto a los vecinos del número 11, el otro edificio adyacente al que colapsó la semana pasada, ha dicho que se quedan “de momento en su casa”.

Por otra parte, ha recordado la petición a la Generalitat para la constitución de una mesa que afronte el problema de la calle Canigó, donde hay cerca de 420 viviendas construidas de la misma promoción que el edificio que se hundió y el que ahora se ha agrietado.

Preguntado sobre si deberían repensar las inspecciones técnicas de edificios (ITE), ha afirmado que no “no sé si se tiene que replantear o no”, aunque ha manifestado que algunos inmuebles, por su decrepitud y condiciones de construcción, deberían tener “una revisión con más profundidad”.

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