Nueve detenidos por sextorsionar a sus víctimas tras contactar con anuncios de prostitución: "Tranquilo, que se te matará"




“Tranquilo, que se te matará”. Es uno de los mensajes recibidos por WhatsApp por una de las víctimas de una estructura criminal dedicada a la sextorsión. La Policía Civil ha detenido a nueve personas, acusadas de formar parte de este congregación. “Pues los socios van para tu casa”, añade el delincuente en esa misma conversación por transporte. De esta forma amenaza a la víctima con la inminente aparición de un supuesto congregación de sicarios a su casa para darle una paliza. Todo se arreglaría si pagaba un chantaje adeudado previamente.

“Faltan 3.000 más ahora para zanjar este problema. Lo haces ya y zanjamos esto ya”, señala otro de los mensajes. La Policía Civil ha localizado a 32 personas presuntamente estafadas por esta red. En total habrían obtenido unos 40.000 euros. El chantaje no era, como se ve, muy cuantioso, por lo que no se descarta que pueda deber muchas víctimas que han preferido no denunciar lo ocurrido y evitar que se supiera que contrataban servicios de prostitución. El importancia podría ser, por consiguiente, mucho decano.

Falsos anuncios de prostitución

“Tranquilo que se te matará. ¿No vas a acreditar?”, añaden los extorsionadores. Todo comenzaba cuando la futura víctima contrataba un servicio de contacto con mujeres a través de una página web. O, dicho con más claridad, pretendía contratar un servicio de prostitución. Algunos de esos anuncios era falsos, publicados por la red ahora desmantelada. Una vez hecho ese impostor contacto, el frustrado cliente comenzaba a tomar amenazas de homicidio por parte de un supuesto sicario mediante mensajes de WhastApp o directamente con llamadas telefónicas en caso de que no pagara una determinada cantidad de billete.

“Estoy ya un poco que no (se) que hacer, quiero terminar esto sin tener ningún problema contigo ni en tu casa ni nulo”, continúa la amenaza con los mensajes por WhatsApp. La Policía Civil, adicionalmente de sextorsión, acento en este caso del “timo del sicario”. Porque efectivamente el sicario no existía. La facción no tenía intención de cumplir ninguna de sus amenazas. Nunca habría paliza ni crimen. Sólo querían obtener un beneficio crematístico del miedo generado a sus víctimas. No se ha producido ninguna acometida física.

Amenazas de palizas y crimen

“El superior está yendo ya para su domicilio a por los socios, yo no se (sic) como tranquilizarlo. Te estoy hablando por la buenas“, añade el estafador con el habitual diversión del “poli bueno, poli malo”. La investigación de la Policía Civil comenzó en marzo de 2023 cuando una de las víctimas puso una denuncia. Contó a los agentes que había solicitado a través de internet contactos con mujeres y que, pocos días luego, había recibido amenazas por transporte de teléfono exigiendo billete a cambio de no enviarle a su domicilio un sicario. Se le amenazaba con “palizas e incluso el crimen”, señala la información facilitada por la Policía Civil. Este persona llegó a realizar transferencias a los extorsionadores por un total de 12.000 euros.

“Dijisteis que se terminó. Ahora llamo a la policía”, señala una víctima en un mensaje. “Como prefieras. Se puede hacer por las buenas. Y se acaba aquí ahora mismo”, rebate el delincuente. La Policía Civil ha detenido a nueve personas, la mayoría en Valencia, pero incluso en Cantabria y Valladolid, como presuntos integrantes de este congregación criminal. Son de varias nacionalidades, incluso españoles. El billete estafado lo reenviaban a cuentas bancarias controladas por ellos, pero incluso a cuentas compradas a terceras personas vulnerables a cambio de comisiones o mediante patraña.

Incluso falsas ofertas de trabajo

El congregación se dedicaba incluso a estafas asociadas a falsas ofertas de trabajo. Cuando las víctimas picaban y les enviaban copia de su DNI y datos bancarios creyendo que habían conseguido un trabajo, los ahora detenidos supuestamente los utilizaban para dar de incorporación servicios de telefonía o cuentas bancarias. La Policía Civil imputa a los detenidos delitos de perturbación, amenazas, estafa, suplantación de identidades, enlucido de capitales y pertenencia a estructura criminal.

“No voy a pedir más, no hay”, rebate una de las víctimas de la sextorsión. Y añade: “Pero que me maten, no que me den palizas para esta mierda de mundo. No se va a matar nunca“. Ahora, al menos de momento, la Policía Civil sí ha puesto punto final al chantaje.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la contemporaneidad de antena3noticias.com.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *