Un hombre ha disparado este martes a su exmujer con un armas de fuego y, a continuación, se ha suicidado frente al tribunal contencioso de la ciudad francesa Montpellier, donde debían comparecer por trámites civiles relacionados con su divorcio. El asaltante esperó en presencia de los tribunales y disparó una vez sobre la víctima ayer de utilizarla contra sí mismo.
La Prefectura -delegación del Gobierno- del unidad de Hérault ha confirmado la crimen de dos personas. La víctima, una mujer de 66 abriles, que estaba divorciada de su supuesto adverso, un hombre de 72, desde el 2016.
Según ha informado el fiscal del caso, Fabrice Bélargen, los dos habían sido citados “en presencia de el sentenciador de clan para matar sus intereses patrimoniales”. Asimismo, ha afirmado que “no había ningún procedimiento en curso por violencia doméstica, ni una orden de protección” alrededor de el hombre.
El ministro de Justia francés, Éric Dupond-Moretti, ha regalado sus condolencias, a través de la plataforma ‘X’, a la víctima y a su clan, y se ha mostrado “horrorizado por el feminicidio que ha tenido oportunidad”. Además ha expresado su apoyo alrededor de el personal del tribunal, que ha tenido que presenciar el suceso, y ha activado una dispositivo de protección psicológica.
Tras el incidente, los juzgados fueron evacuados por precaución. Encima, en el oportunidad de los hechos se colgaron sábanas blancas para proteger los cuerpos de las víctimas.
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