Los hechos han saledizo a la luz cuando la mamá, de 19 abriles, llevó al bebé al Hospital Álvaro Cunqueiro, en Vigo, para que le curasen las heridas que tenía en la cara y que, supuestamente, habrían sido provocadas por mordiscos de su progenitor.
Encontraron otras lesiones en otras partes del cuerpo
Una vez en el centro médico, los pediatras que atendieron al gurí habrían comprobado que, encima de los mordiscos en la cara, tenía más lesiones en otras partes del cuerpo, incluso algunas en las costillas que ya estarían curadas. Esto demostraría que podría activo recibido malos tratos con antelación.
Desde el hospital se emitió un noticia manifestando las sospechas de la posible existencia de un caso de maltrato de niño. Este noticia se envió al Tribunal de Primera Instancia e Instrucción número 1 de O Porriño, en Pontevedra, y fue entonces cuando se abrió una investigación y se decidió inquirir al padre. Esto no fue posible porque el hombre desapareció ese mismo día en el que el último fue trillado por los servicios médicos. Ahí se desataron las alarmas.
El ahora investigado permaneció oculto en Tui, una aldea próxima a O Porriño, donde se produjeron los hechos, hasta que la Pareja Civil dio con él y procedió a su detención. Tras advenir a disposición sumarial, ha quedado en soltura con cargos.
En estos momentos, tras las primeras informaciones que han trascendido, la custodia del gurí ha sido retirada a los dos progenitores y se encuentra tutelado por la Xunta de Galicia. Mientras, los servicios sociales han descubierto un expediente para investigar el entorno llano en el que vivía el pequeño.
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