El verano deja 21 fallecidos en las carreteras de Castilla y León, la siniestralidad más baja de la última década


Un total de 21 almas -siete en julio y trece en agosto- reclamaron este verano las carreteras de Castilla y León por las que Se han registrado diez millones de viajes de larga distancia, la cifra más alta de la serie histórica y un 4,68% más que en el mismo periodo de 2022.

Las víctimas mortales, que descienden respecto a 2022, cuando hubo 30 de personas que perdieron la vida en el asfalto, supone la cifra más baja de la última década y supone más de una cuarta parte del total de fallecidos en las carreteras en lo que va de año, que alcanza ya los 77, también por debajo de los registros del año pasado , lo que rompió con la tendencia a la baja de la siniestralidad de los últimos años.

Una distracción fue la causa de la mitad de los accidentes con fallecidos este veranodijo ayer la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, en la presentación del balance de tráfico de verano en el que citó también el cansancio, el uso de dispositivos móviles, el no uso del cinturón de seguridad -tres de los 13 fallecidos en coches y furgonetas- ( El 23%) no hacía uso o consumo de alcohol y drogas como factores presentes en muchos de los accidentes con víctimas mortales.

Por tipo de vía, oNinguno de cada tres perdió la vida en carreteras convencionalessiendo el turismo el tipo de vehículo en el que se desplazaron más fallecidos y la salida por carretera como la causa por la que más personas han fallecido, un total de doce.

En cuanto a los llamados usuarios vulnerables -ciclistas, peatones o motociclistas- supusieron una de cada tres muertes en las vías de la Comunidad, con especial incidencia en el último de estos grupos, que sumó cinco fallecidos. Un hombre con experiencia en conducción, de entre 27 y 49 años, es el perfil de estas víctimas sobre dos ruedas. Todos ellos llevaban casco, según la información facilitada por la Delegación del Gobierno en Castilla y León.

En cuanto a los fallecidos en verano, se produce un aumento en el número de mujeres fallecidas, once -cuatro más que hace un año-, frente a diez hombres. En cuanto a la edad, los fallecidos se concentran en el rango entre 45 y 54 años (43%) y ningún menor de 14 años ha perdido la vida durante estos dos meses.

Por provincias, destaca que las de Palencia y Valladolid no han registrado ningún accidente mortal. Donde más personas murieron fue en Burgos (seis) y en Ávila y León (cuatro en cada uno). En Salamanca, Segovia y Zamora murieron dos personas y una en Soria. Aunque no registra las peores cifras de defunciones, León es la “provincia que presenta peores datos”. Este verano se ha duplicado las víctimas mortales de hace doce meses en línea con lo ocurrido en los meses anteriores y ya hay un 70 por ciento más de víctimas mortales (de 10 a 17) que en 2022 en este territorio.

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