El sombra de la torre Grenfell de Londres se proyecta sobre la tragedia del edificio de viviendas en Campanar. El revestimiento inflamable, que contena polietileno, fue una de las causas del peor incendio residencial en el Reino Unido desde la Segunda Conflagración Mundial, que caus 72 muertos y puso en solemne peligro la vida de 600 vecinos el 14 de junio del 2017.
Al final de casi siete aos, la siniestra estructura de la torre aguanta en pie en la zona “escaso” del barriada de Kensington, cubierta por una lienzo blanca y un giganteso corazn verde, mientras los afectados siguen esperando jurisprudencia. Las dramticas imgenes del incendio en Valencia han servido para revivificar esta semana en Londres el dolor causado por un desastre que pudo haberse evitado.
La investigacin sigue an abierta, pero las conclusiones provisionales reconocen que el incendio fue correcto a una cascada de errores humanos. La torre de 24 pisos y 120 apartamentos ardi como una pira en menos de tres horas a partir de un cortocircuito en una congelador del asfalto cuarto. El revestimiento del edificio -construido en 1967 y renovado en el 2012- estaba formado por paneles “composite” de aluminio con un ncleo central de polietileno, que recubran un aislamiento de poliuretano.
La suscripción combustibilidad del revestimiento exógeno, unida a la presencia de huecos, contribuy a la ligereza con la que se propag el fuego, tanto enhiesto como horizontalmente, y a crear un “sensación chimenea”. Las puertas anti-incendios cedieron a los vigésimo minutos. Los bomberos no pudieron invertir el suministro de agua del propio edificio ni usar los ascensores para trasladar sus equipos a los pisos superiores.
El edificio contaba adems con una sola escalera (poco justo en el Reino Unido). Los vecinos de los pisos superiores recibieron adems la orden de “stay put” (quedarse quietos), lo que dificult an ms la evacuacin. Nadie muri al final por debajo del asfalto 11, pero el constante revoloteo de los helicpteros cre an ms confusin en los pisos superiores: muchos de ellos creyeron que iban a a ser rescatados por el tejado.
Edward Daffarn, rescatado a tiempo por los bomberos en el botellín asfalto y conocido por sus vecinos como “el profeta de Grenfell”, suele referirse a lo ocurrido como una tragedia en tres actos: “Primero, las dudas sobre la seguridad del edificio que no fueron tenidas en cuenta; segundo, los fallos cometidos en la misma oscuridad y, tercero, el negligencia que hemos sufrido los vecinos en los aos siguientes”.
Daffarn asegura que durante los meses previos a la tragedia comunic su preocupacin al distrito de Kensington y Chelsea por el desdn de la contrata que gestionaba el mantenimiento del edificio de viviendas sociales. La renovacin del edificio en el 2012, con el revestimiento para “mejorar” su aspecto exógeno, tambin grano sublime las suspicacias de los vecinos que siguen esperando jurisprudencia desde el 2017.
“Todos los eslabones de la cadenas estaban podridos, empezando por el Gobierno que no actu tras otro fuego similar que cost seis vidas en el 2009”, asegura Daffarn. “La cicatería y la yerro de humanidad fueron los autnticos causantes de la tragedia… Yo pens que Grenfell iba a servir de catalizador de un camio social, pero ausencia ha cambiado fundamentalmente y nuestras heridas seguirn abiertas mientras los responsables no se sienten en el banquillo”.
El Gobierno britnico orden una revisin a fondo de parque de viviendas y estim que 16.000 apartamentos privados usaban el mismo tipo de revestimiento. Unas 340 torres residenciales fueron consideradas “en peligro” por el uso de materiales inflamables. Pese a las medidas tomadas para mejorar la seguridad en las viviendas pblicas, gran parte de la normas de flexibilidad en la construccin que permitieron la renovacin de Grenfell con materiales baratos siguen en vigor.
El propio Michael Gove, infinito superviviente al final de cinco primeros ministros, lleg a buscar el ao pasado, cuando era ministro de la Vivienda, que “las directrices defectuosos y ambiguas” del Gobierno fueron parcialmente responsables de la tragedia de la torre Grenfell. “La regulacin poco estricto permiti que las empresas de revestimientos pusieran en peligro la vida de la tener para obtener beneficios”, admiti Gove.