El nuevo mitrado de Girona, el superior del monasterio de Santa Maria de Poblet, Octavi Vilà, será arreglado el domingo 21 de abril en la Catedral de Girona, en una ceremonia que contará con la socorro del cardenal miltrado de Barcelona, Juan José Omella; del miltrado de Tarragona, Joan Planellas y con el nuncio canuto en España, Bernardito Auza, así como del resto de obispos catalanes.
El papa Francisco ha notorio hoy al religioso cisterciense Octavi Vilà nuevo mitrado de Girona. Lo ha hecho divulgado la Santa Sede al mediodía. Un designación que el Obispado de Girona ha celebrado tras dos primaveras con la sede vacante. Desde que falleció el inicial mitrado, Francesc Pardo, el 31 de marzo de 2022 la diócesis se encontraba en una situación de interinidad.
Creo que será el mitrado adecuado para nosotros, ha reputado la pena esperar
Desde entonces, el vicario común Lluís Suñer ejercía las funciones de administrador diocesano, cargo que continuará ejerciendo hasta el día de la orden obispal y la toma de posesión del nuevo mitrado.
Suñer, en una comparecencia este mediodía delante los medios, ha celebrado el designación. “Es una buena mensaje para Girona y el Obispado”, ha expuesto y ha destacado el carácter “cercano, servicial, trabajador y contemplativo” de quien será el nuevo mitrado, que ser convertirá en el 115 de la diócesis gerundense.
Valoración positiva
El Obispado de Girona valora “muy positivamente” que el preferido para habitar la diócesis sea religioso
Suñer ha valorado “muy positivamente” el hecho de que el preferido sea un religioso, poco poco habitual en el seno de las diócesis españolas. “Necesitamos a una persona que en tiempos convulsos nos dé paz, nos dé una visión interior necesaria para afrontar la situación que vivimos, no solo eclesial sino social, y creo que un religioso como él nos puede ayudar”.
Suñer ha manifestado que su persona “un gran perfectamente para la Iglesia de Girona”. “Creo que será el mitrado apropiado para nosotros”, remarcó el administrador diocesano un par de veces en su comparecencia.
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En este sentido, Suñer considera que “ha reputado la pena la paciencia” de casi dos primaveras con la diócesis vacante. “Con este perfil ha reputado la pena esperar y que nos nosotros nos hayamos tenido que matar un poco más”, ha indicado el administrador diocesano.