Hay muchos factores determinantes que influyen a la hora de encontrar el coste de una carrera universitaria, pero el que más influye, sin duda, es la residencia. No tiene nada que ver con seguir en la casa familiar con tener que alquilar un piso, lo que dispara los gastos. Pero las diferencias ya empiezan en la elección de la propia titulación. En el Campus existen dos precios por crédito según la titulación: 9,85 o 13,93, que multiplicados por el 240 créditos necesarios para obtener un título universitario, resulta en 2.664 o 3.342 euros. Posteriormente, los propios jóvenes cifran el coste anual del material escolar (fotocopias, manuales, bolígrafos, etc.) en 100 euros, que pueden duplicarse si compran un ordenador portátil.
la vivienda determina
El factor más determinante es la residencia. Los estudiantes universitarios que se quedan en su ciudad suponen un menor esfuerzo económico para sus familias, por razones obvias, que los que se van al extranjero. Tres estudiantes de la UVigo dan fe de ello: Sara Castro, que ya vivía en Ourense; Xián Martínez, que se desplaza diariamente desde Celanova; y Fayna Beaño, que vive de alquiler en la ciudad. Castro indica que la situación económica influyó en su decisión de quedarse a estudiar en el Campus: “Por un lado pensé que la vida universitaria sería, sin mis padres, sería muy buena, pero, por otro, pensé que sería un gasto innecesario para mis padres, poder estudiar lo que yo como en Ourense”. En su caso personal, elige el coche para ir a clase, por lo que el coste del combustible ronda los 50 o 60 euros.
En el caso de Martínez los gastos ya son mayores. En su caso, aunque admite que le cuesta diferenciar el gasto propio de sus estudios, ya que utiliza el coche familiar, afirma que el gasto ronda los 80 euros al mes, además de tener disponibilidad para utilizar el vehículo en el que viaja toda la familia. A esto hay que sumarle un gasto como es el permiso de conducir, ya que “no podía depender constantemente de que mi país pudiera llevarme o traerme, así que me vi obligado a quitármelo. Es verdad que tendría que dibujar lo mismo, pero también influyó”. Indica que sus gastos en su material son mayores, ya que realizó una importante inversión en un ordenador portátil sólo para estudiar, así como manuales específicos para determinadas materias, cuyo precio ronda los 40 euros. “Creo que, más o menos, cada curso me puede costar directamente mil euros”, estima.
Desde Ribadavia
Pero el caso más caro es el de Beaño. Aunque es natural de ribadavia, elige vivir en alquiler en la ciudad. En primer lugar, indica que Es muy difícil conseguir plaza en una residencia.: “Lo miré el primer año, pero era demasiado caro. La única económica era donde Laboral, pero claro, está en la otra punta de la ciudad”. Respecto a sus gastos mensuales, menciona que necesita al menos 500 euros mensuales entre alquiler, gastos, comidas y otros. “He estado en tres pisos diferentes en tres años, pagando lo mismo, pero los pisos están cada vez más lejos del Campus y, por supuesto, siempre son compartidos. Cada año es más difícil encontrar piso a buen precio y en buen estado”, menciona.
Así, tomando estos tres ejemplos, obtener una titulación en el Campus puede costar entre 3.000 euros a un joven que sigue viviendo con sus padres en más de 20.000 para quienes deben pagar alquilerelectricidad, agua, internet, comida, viajes y otros gastos del día a día.