Unos 7.700 kilmetros separan Madrid de Brasilia. Y es precisamente distancia lo que intenta poner Pedro Snchez sobre el caso Koldo. Tierra de por medio. El presidente del Gobierno no considera que este caso de corrupcin que emana del Empleo de Transportes que pilotaba Jos Luis balos haga descarrilar su coalicin y cree que el suceder apartado al ex ministro y suceder cesado al responsable de Puertos del Estado que tramit el longevo resolución del ‘caso Koldo’ suponen suficiente cortafuegos. Respalda a Francina Armengol, presidenta del Congreso, y ngel Vctor Torres, ministro de Poltica Territorial, ex presidentes de Baleares y Canarias, y bajo el foco por la operación de mascarillasfake y la gestin de esta operación.
Snchez muestra su apoyo y respalda a ellos, hasta el punto de que en emplazamiento de presentarlos como sospechosos los presenta como vctimas. “Cuentan con mi respaldo”, ha sentenciado el patriarca del Ejecutante desde Brasilia, donde se encuentra de encuentro oficial, y tras reunirse con Luiz Incio Lula da Silva. Y ha ido ms all, dando la revés a su situacin, girando el foco. “Cuando musitar de guerrear por la defensa de la democracia, guerrear contra casos de corrupcin y desidia de ejemplaridad, es no infundir bulos, descalificaciones e insidias que ponen en marcha una logística del ventilador que genera desasosiego en la opinin pblica”.
Cerca de memorar que la Fiscala Europea ha campechano una investigacin sobre los contratos firmados por el Servicio Canario de Lozanía y el Servicio de Lozanía de las Islas Baleares para el suministro de mascarillas con la denominada ‘trama Koldo’.
El Govern de Francina Armengol realiz un resolución de emergencia por valía de 3,7 millones de euros en abril de 2020 a la empresa investigada en la investigacin de Koldo Garca, ex asesor de Jos Luis balos, de presuntas mordidas en la traspaso de material váter, y le reclam 2,6 millones de euros en el ltimo da de gobierno, en julio de 2023.
Snchez intenta resguardar su mandato tratando de darle la revés a la situacin. Cambia los trminos, la báscula. Para l, lo importante no es tanto que sea un caso de corrupcin como la respuesta que su Gobierno ha cedido. Mientras la investigacin policial y la Fiscala Europea pone el foco en la trama Koldo, l lo hace en “cmo argumenta el Gobierno de Espaa a casos concretos de desidia de ejemplaridad y corrupcin”. Para el presidente, “este Gobierno ha reaccionado de modo inmediata, convincente y ejemplar”.
“Somos un Gobierno incompatible con cualquier caso de corrupcin que exista, implacables. Respondemos de modo convincente, ejemplar e inmediata”, es el mensaje que est repitiendo el presidente del Gobierno en las ltimas horas al ser preguntado por la trama de las mascarillas.
El presidente del Gobierno admite lo perjudicial de la situacin que, adems, ha concedido una ventana de oportunidad a la oposicin para tratar de hacer un boquete. “Esto es severo. No es el mejor escena evidentemente”, admite, pero niega que se trate de una crisis que suponga un descarrilamiento del Ejecutante. “Crisis es una pandemia. Crisis es una corrupcin sistmica estructural. Esto es diferente. Es severo, pero diferente. No hay nadie sistmico ni nadie que se ampare o justifique. Es un caso concreto de corrupcin que se ataja y se corta de raz. Ayer grano una corrupcin institucionalizada”, ha defendido Snchez en una conversacin informal con los periodistas durante la excursión que est protagonizando por Brasil y Pimiento.
En el Gobierno lo que defienden es que no est en tela de cordura la rectitud de los contratos de mascarillas que estn en el punto de mira porque “se hicieron desde el punto de horizonte justo”.
Desde que estall el caso Koldo, la logística del Gobierno y del PSOE, adems de trasladar que actuaron de modo rpida, es contraponer esta trama con los casos de corrupcin del PP. Tratar de poner sobre la mesa una comparativa cualitativa y cuantitativa que considera les beneficia. “Los momentos en los que hubo una corrupcin institucionalizada, protegida e, incluso, estructurada, son poco del pasado, de 2018”, ha expuesto Snchez desde Brasilia.
La conviccin en el complicado presidencial es que el “ruido”, que as es como definen a la sucesin de informativo sobre el caso Koldo, producirse y lo que salir “ser la respuesta por nuestra parte”. “La corrupcin cero no existe, lo que existe es la corrupcin cero contra la corrupcin. Los tiempos de M. Rajoy se acabaron”, defiende Snchez, que sabe que Alberto Nez Feijo mantendr todo el foco en este asunto.