La reconstrucción del puente de Barxa, que hace más de cuatro primaveras comunicaba los núcleos boleses de Barxa y Seixo, está en manos de la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil, cuyos técnicos deben informar de la representación a desarrollar. Lo apuntó el corregidor, Alberto Vázquez Rodríguez, quien explicó que el presupuesto aumentó en aproximadamente 100.000 euros respecto al plan original, que elaboró la Diputación provincial. Recientemente, el Concello bolés recibía la confirmación de una ayuda de 7.000 euros, otorgada por el organismo ourensano. En la ahora, la recuperación de esta construcción supondrá una inversión de 570.000 euros.
Alberto Vázquez explicó que el plan original hubo de ser reformado para adaptarlo a las exigencias de Medio Medio ambiente y la puesta al día de los precios. Así las cosas, nulo más cobrar el noticia de la Confederación Hidrográfica, el corregidor iniciará la búsqueda de financiación para ejecutar las obras. Demora conseguirla en el organismo responsable de cuenca y, si es necesario, en otras administraciones públicas.
El vallado al tráfico derivado de las grietas que en diciembre de 2019 aparecieron en el puente obliga a los vecinos de Barxa y Seixo a rodear unos 30 kilómetros para desplazarse en un transporte entre ellos, cuando casi nada los separan un par de kilómetros.