María Sanz, de 76 años, perdió su cartera con poco dinero, una cadena de oro y una alianza. La mujer iba a preparar ese domingo una paella para toda su familia en su garaje de El Grao (Castellón). Fue a hacer las últimas compras y regresó a la planta baja a las 10.30 de la mañana. Alguien la estaba mirando, pero ella no se dio cuenta. Un individuo la siguió y entró detrás de ella apenas abrió la puerta. A las once ya estaba muerta. Me encontraba con un amigo en una cafetería. Alrededor de las 10:45, pero no se presentó ni contestó el teléfono. Poco después encontraron su cuerpo. Ocurrió el 23 de enero del año pasado en las calles Chamberga y José María, a un paso del distrito marítimo.
El móvil del crimen había sido el robo, Botín mínimo, suficiente para una dosis. La UDEV de Castellón lo tuvo claro desde el principio. María había intentado defenderse y bajo sus uñas había restos de células con ADN de quien la había matado, pero cuando esa huella genética fue introducida en la base de datos de ADN de la policía (en la que todos los Cuerpos más los países del Tratado de Prühm participar, ) el individuo no se presentó. Por lo tanto, tenían una huella genética anónima y todas las posibilidades estaban abiertas.
Los investigadores recogieron imágenes de una cámara situada en un bazar chino de la cercana plaza de la Panderola en las que se podía ver pasar, sin que se distinguiera su rostro, a la mujer y a un individuo encapuchado, que parece estar observándola.
El crimen conmocionó al barrio. María era una mujer muy apreciada y también era la madre del presidente de la Cofradía de Pescadores de San Pedro de Castellón. Pasaron los meses y a pesar de los esfuerzos de los investigadores, las investigaciones se estancaron.
El pasado otoño se sumaron a la investigación agentes de la Sección de Homicidios de la UDEV Central, que acababan de resolver el caso del asesino en serie alicantino. Una de las investigaciones que contribuyó a dar con el paradero de Nikolai, autor de dos asesinatos y un atentado, fue el análisis de ADN ampliado realizado por el Instituto de Ciencias Forenses ‘Luis Concheiro’ por la Universidad de Santiago de Compostela, pionera en genética forense.
Análisis de inteligencia y polimorfismos.
Una vez más enviaron las muestras tomadas debajo de las uñas de María al laboratorio, que cuenta con Análisis de polimorfismo de ADN. acreditado y que colabora con las investigaciones criminales. Su función es el análisis de mezclas de ADN, la extracción y análisis de muestras altamente degradadas y la predicción de características físicas y origen biogeográfico en casos en ausencia de un sospechoso.
En este caso, la ciencia volvió a dar una pista clave, aunque la muestra era bastante crítica: ni semen ni sangre, sólo restos de células. Lograron determinar algunas características físicas de la persona y que era de origen norteafricano. Estos resultados se combinaron con un análisis de Inteligencia en el que el rastreo de los teléfonos que se encontraban en la zona en ese momento, más algunos patrones de comportamiento acotaron el perfil. El asesino Debe haberse movido por la zona. Estaba lloviendo y era domingo por la mañana, podría ser consumidor de drogas y ya han cometido delitos contra la propiedad.
“Está usted equivocado. No voy a hablar. No he hecho nada. No recuerdo nada”
El detenido a los policías.
La cuadratura llegó con otra cámara: la del hotel Herreros, muy cerca de la escena del crimen. Entre los que pasaron esa mañana se encontraba un individuo que vestía la ropa grabada por la primera cámara del bazar y parecía un norteafricano. Fue sometido a una discreta vigilancia y finalmente se demostró que su ADN era el mismo que el recogido en los dedos de la víctima. el que mató con la técnica del ‘mataleón’, apretando su cuello por detrás hasta dejarla sin flujo sanguíneo. Tiene 32 años y es corpulento; María tenía 76 años.
El 4 de septiembre lo arrestaron afuera de la casa donde vivía con sus padres. “Estás cometiendo un error”, fue lo primero que le dijo a la policía. Después de eso no iba a hablar. “No recuerdo nada”. Pero ya se lo recordaron, tras el registro del domicilio. El martes fue ingresado en prisión sin derecho a fianza.
El detenido, Nacido en Marruecos, Llevaba mucho tiempo en España. trabajó como soldador en BP en El Grao. Tiene antecedentes de tráfico de drogas y pequeños hurtos; también un violento robo de bolso. Fue hace mucho tiempo. En teoría había sido rehabilitado, pero es consumidor de drogas.
La Policía da por cerrado el caso, un año y ocho meses después. Antes de que el presunto autor fuera detenido, otro individuo pasó varios meses en prisión tras solicitarlo la Fiscalía. Un testigo lo identificó como el autor de la muerte de María, pero las pruebas de ADN sirvieron para exonerarlo.