En concreto, el TSXG ha estimado el procedimiento de apelación de Fiscalía contra una sentencia dictada por la Audiencia de Ourense, que absolvió del delito continuado de estafa al manager de una residencia geriátrica a quien un residente instituyó heredero universal de todos sus fondos, al tiempo que desheredaba a sus dos hijas.
En la resolución, la Sala explica que el compromiso de capacidad ha sido analizado en la sentencia de primera instancia “de un modo que no es coherente ni con los datos objetivos de autos ni con los propios que afectan a la capacidad de la víctima”, apuntando que “tener capacidad para el otorgamiento de los negocios jurídicos no excluye el simulación, que se muestra evidente” en este caso.
“Debemos advertir que en autos no se juzga a ningún fedatario divulgado ni se aprecia razón alguna o causa que justifique, remotamente, la menester del `entendimiento de alimentos` y, menos aún, el otorgamiento del poder”, explican los magistrados. Asimismo, subrayan que al anciano, una persona de vulnerabilidad, “no se le ha informado ni de las consecuencias de sus actos ni, en existencia, de los propios actos, insistiendo en el ignorante beneficio obtenido“.
El TSXG concluye que existe “un simulación suficiente, que se objetiva en los hechos probados, con un perjuicio patrimonial claro para la víctima, concurriendo evidente dolo y humor de beneficio en el marcado, quien hizo suyo todo el patrimonio de la víctima, forzando un desplazamiento innecesario e injustificado con traslación de activos en perjuicio de aquél”.
Luego, ha revocado la sentencia absolutoria de la Audiencia Provincial de Ourense y ha condenado al hombre a tres abriles y medio de prisión, así como al suscripción de una multa de 2.400 euros.