Las últimas lluvias en la provincia de Castellón han dejado muchas zonas con agua estancada, algo que, unido al calor y la humedad, es un caldo de cultivo para que se reproduzcan estos molestos insectos.
Muchas de las zonas son inaccesibles, afirma Tania Agut, alcaldesa de Torreblanca, hasta el punto de que la fumigación tiene que ser aérea y no terrestre: “Queremos evitar picaduras a vecinos y también a turistas y para ello estamos trabajando duro y codo con codo con los técnicos de control de plagas”.
La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana ha autorizado el plan de vuelos en varios puntos de la provincia de Castellón en coordinación con la Diputación Provincial de evitar que las larvas eclosionen.
control de plagas
Se trata de controlar la proliferación, dice el biólogo Ricardo Acosta del laboratorio de control de plagas de Lokímica: “Esto pasa cada vez que las lluvias son intensas, como la última DANA, y por eso actuamos por tierra y aire directamente sobre las larvas, sobre el enfoque. “Nos centramos en zonas con agua que son lugares de cría y refugio para estos insectos”.
Álvaro Lis, coordinador técnico de ADDA del servicio de control y tratamiento de mosquitos de la diputación de Castellón, ha estado presente hoy en Torreblanca supervisando los vertidos aéreos: “Los técnicos utilizan un herbicida biológico. Es importante actuar con rapidez y eficacia en municipios, barrancos, ríos, marismas o lugares que han sido previamente estudiados como posibles fuentes. Hay que evitar que haya población afectada.”
El helicóptero lleva todo el dia fumigando en la zona del Parque Natural Prat de Cabanes-Torreblanca y estará operativo durante toda la semana mientras los técnicos continuarán con las descargas aéreas. Además, se intensificarán los tratamientos terrestres en muchos otros puntos de la provincia para prevenir plagas.