Los vecinos del municipio no han tenido más remedio que adaptarse a una situación que, desde hace seis meses, les obliga a circular con nuevas normas. En el momento en que se encuentran con el poste de electricidad, deben invadir el carril contrario para sortearlo, como si un vehículo que quieren adelantar sería tratado. Sin embargo, si alguien se le adelanta, deberá detenerse y esperar.
La compañía eléctrica debería haber retirado dicho poste a principios de año, pero sigue ahí. Algo que ha desatado innumerables comentarios de vecinos que, meses después, han empezado a tomárselo a broma.
Para algunos, de hecho, este poste eléctrico ya forma parte de la historia de este municipio de menos de 500 habitantes. Se trata de una situación inusual a la que, de momento, no le ven fin, por lo que han decidido afrontarla de la mejor manera posible: con humor.