Las cuatro provincias gallegas han permanecido este sábado en aviso amarillo debido a las tormentas que, a lo largo del día, han dejado un reguero de incidencias en toda la Comunidad. En tan sólo 24 horas, entre la tarde del viernes y las 19.30 horas del sábado, se han producido Más de 9.000 rayos cayeron en territorio gallego.
El dispositivo eléctrico también ha estado acompañado de la caída de fuertes trombas marinas. Especialmente destacable ha sido el caso de la ciudad de Ourense, donde acumulaciones de líquido de 93,2 litros por metro cuadrado que han provocado inundaciones puntuales en zonas del centro urbano.
Como ya se ha comentado anteriormente, han sido muchas las incidencias provocadas por el fuerte viento y las trombas marinas: en total, 112 Galicia atendieron entre las 00.00 y las 18.00 horas del sábado 132 situaciones relacionadas con la tormenta, recoge Europa Press. Entre ellos, el desprendimiento de una tienda de campaña en la parroquia de Melián (Lugo), que dejó también a un herido que tuvo que ser evacuado en ambulancia al Hospital Universitario Lucus Augusti tras recibir un impacto en la cabeza; y un incendio en Begonte (Lugo), posiblemente provocado por un rayo, que tuvo su origen en un edificio –en ese momento vacío– y tuvo que ser sofocado por los bomberos.
Sin embargo, la previsión es que el tiempo adverso mejorar durante la jornada de este domingo; Sin embargo, el aviso amarillo se mantiene activo en toda la provincia de Lugo, en la montaña de Orense y en la comarca de Valdeorras, donde se esperan de nuevo tormentas fuertes.