Al parecer, hay nuevos compuestos que imitarían el impulso físico del gimnasia, por el momento adentro de las células de los roedores. Se alcahuetería de un descubrimiento que podría conducir a una nueva guisa de tratar la atrofia muscular y otras afecciones médicas en las personas, incluidas la insuficiencia cardíaca y las enfermedades neurodegenerativas.
Los investigadores han presentado sus resultados en la reunión de primavera de la Sociedad Química Estadounidense (ACS). ‘ACS Spring 2024’ es una reunión híbrida que se lleva a extremo de guisa imaginario y en persona del 17 al 21 de marzo.
Para identificar SLU-PP-332, examinaron la estructura de los ERR y la guisa en la que se unen a las moléculas que los activan. Tras ello, para mejorar su descubrimiento y desarrollar variaciones que pudieran ser patentadas, Elgendy y su equipo diseñaron nuevas moléculas para reforzar la interacción con los receptores y provocar de esa guisa una respuesta más resistente que la que puede proporcionar el SLU-PP-332. Al desarrollar los nuevos compuestos, igualmente optimizaron las moléculas para otras características deseables, como la estabilidad y el bajo potencial de toxicidad.
Lo que hicieron es comparar la potencia de SLU-PP-332 con la de los nuevos compuestos, observando el ARN, una medida de la expresión genética, de unos 15.000 genes en células del músculo cardíaco de rata. Los nuevos compuestos ocasionaron un anciano aumento en la presencia de ARN, lo que sugiere que simulan de guisa más potente los existencias del gimnasia.
Lo que sugiere la investigación que utiliza SLU-PP-332 es que apuntar a las ERR podría resultar útil contra enfermedades específicas. Lo que indican estudios en animales con este compuesto preliminar es que podría presentar un beneficio contra la obesidad, la insuficiencia cardíaca o el menoscabo de la función renal con la años. Los resultados de la investigación actualizada sugieren que los nuevos compuestos podrían tener existencias parecidos.
La actividad de ERR parece que igualmente contrarresta los procesos dañinos que ocurren en el cerebro en pacientes diagnosticados con Alzheimer, al igual que los que padecen otras afecciones neurodegenerativas. “En todas estas condiciones, las ERR desempeñan un papel importante”, afirma Elgendy. “Si tienes un compuesto que pueda activarlos de guisa efectiva, podrías producir muchos existencias beneficiosos”.
Elgendy y sus compañeros esperan probar los nuevos compuestos en modelos animales a través de Pelagos Pharmaceuticals, una nueva empresa que cofundaron. Igualmente estudian la posibilidad de desarrollar compuestos como posibles tratamientos para trastornos neurodegenerativos.
Se alcahuetería de una investigación que ha sido apoyada por el Instituto Doméstico sobre el Envejecimiento de los Institutos Nacionales de Vigor.
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