En Vinaròs, según Alejandro Calvente, presidente del sindicato médico CESM, las demoras para visitas no urgentes superan los dos primaveras: “Consideramos que son plazos inasumibles que, encima, ponen en prohibición la calidad asistencial. En presencia de esta situación hemos reclamado muchas veces a la Conselleria de Sanidad refuerzo de plantilla para compendiar las listas de demora y poder ofrecer a los pacientes una buena subsidio”.
Otras especialidades médicas todavía se ven afectadas. En Digestivo hay un año de demora, en Rehabilitación, unos siete meses, en Pediatría dos o tres meses. En La Plana, Calvente acento de que la aplazamiento supera los 100 días, y añade que es urgente solucionar esto cuanto ayer.
Una progreso en las condiciones laborales es imprescindible para evitar la fuga de profesionales, poco en lo que coinciden todos los sindicatos. Se comercio de compendiar cuanto ayer la aplazamiento que afecta directamente a los pacientes y que está causando mucho malestar.
Los médicos contra las guardias
Algunos médicos llevan tiempo denunciando las condiciones de trabajo que se desarrollan en las guardias.
Rosa Ibán es médico de urgencias en el Hospital Universitario Río Hortega y todavía vicepresidenta del Colegio de Médicos de Valladolid y reconoce que algunas de estas guardias, no todas, “son inhumanas”. “Las guardias nacieron hace más de 50 primaveras como inmediatez, accesibilidad y disponibilidad de los médicos para estar pendientes durante 24 horas para a atender urgencias”, explica Ibán.
La ministra de Sanidad, Mónica García, le ha claro la desavenencia a las guardias médicas de 24 horas y ha anunciado que el objetivo es eliminarlas en esta sesión. Su Empleo estudia la fórmula más actos, aunque ya ha avanzado que podría comenzar con una reducción. Así, las guardias pasarían a ser de 17 horas máximas de servicio continuo.
sin secuestro, a los sanitarios todavía les preocupa que su salario se vea afectado y por una posible reducción salarial, poco que, en principio, el Empleo de Sanidad ha descartado. Estos extras suponen una buena parte de las retribuciones mensuales de estos profesionales.
Esta médico de urgencias lo ve complicado, “pero la esperanza es lo postrero que se pierde. El médico tiene que trabajar con descansos, porque atendemos a personas”. “Hay que estudiarlo a fondo para que ganemos todos” y concluye pidiendo mejores contratos para que los médicos se queden “y tengamos”.
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